En el primer trimestre del año, a la par de la disminución de los contagios por covid-19 y el relajamiento de las restricciones sanitarias, los restaurantes y los servicios de esparcimiento como es alojamiento han mostrado un mayor interés por adquirir créditos, de acuerdo con los datos de la Asociación de Bancos de México (ABM).
De enero a marzo de 2021, el sector de créditos a restaurantes aumentó 11 por ciento, mientras que el de servicios recreativos aumentó 1.2 por ciento en comparación con el mismo trimestre de 2020, indicó en conferencia Daniel Becker, presidente de la ABM.
“El pico más importante de disminución en créditos de este sector fue en el primer confinamiento, en marzo y abril. Lo que ya vemos es que una de los segmentos de mayor crecimiento está en este rubro de los servicios y en la medida en la que no haya confinamiento, seguiremos incrementando y regresando esto a niveles pre pandemia”, dijo el banquero en conferencia.
Agregó que el crédito a las empresas varía por sectores y el impacto que la pandemia tuvo en estos; por ejemplo, el crédito al sector minero, mostró en el trimestre una caída de 43.2 por ciento, transportes y medios de comunicación cayó 28.4 por ciento, mientras que comercio al por menor bajó 20.1 por ciento. En contraste la construcción mostró una baja de 1.8 por ciento, educación y salud cayó 4.8 por ciento y servicios profesionales 8.5 por ciento.
En conferencia, Becker Feldman aseguró que la recuperación se ha mostrado heterogénea, a distintas velocidades de acuerdo a las regiones, lo que responde a su vocación económica; mientras que las empresas del centro han mostrado menor dinamismo en comparación con las de la región centro-norte, la región sur- sureste ha mejorado en el segmento de consumo.
El crédito al consumo mostró una ligera recuperación en comparación con el cierre de 2020, aunque aún se ubica en número negativos en la comparación anual, obtuvo una baja de 8.3 por ciento comparándolo con marzo de 2020, mientras que las hipotecas continuaron aportando a la recuperación de la cartera con un incremento de 9.1 por ciento con más de 12 mil originados en el mes.
El crédito otorgado a través de tarjetas obtuvo una variación negativa de 10.7 por ciento, mientras que los créditos otorgados vía nómina disminuyeron 2.8 por ciento, los créditos personales en 19.9 y los dedicados a bienes duraderos cerraron marzo con un incremento 0.9 por ciento.
En contraste, durante marzo de este año, la banca registró una fuerte disminución en el crédito a las empresas con una contracción de 13.5 por ciento en comparación con el mismo mes del año pasado. Este segmento representa 48 por ciento de la cartera otorgada al sector privado; sin embargo, aunque aún no muestra recuperación si tiene indicios de estabilidad con respecto al trimestre anterior.
Sin embargo, el crédito otorgado a micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes) continua padeciendo los estragos de la crisis generada por el covid-19 el año pasado, con un resultado de 399 mil millones de pesos, una contracción de 7.4 por ciento.
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Becker aseguró que a pesar del contexto, la banca cuenta con 1.4 billones de pesos en liquidez para prestar a proyectos viales, a familias y empresas. Aunque la dinámica continúa en que los clientes prefieren ahorrar y gastar los recursos propios por encima de utilizar líneas de crédito.
MRA