Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la demanda mundial de combustibles fósiles alcanzará su punto máximo en 2030, a medida que aumenten las ventas de automóviles eléctricos y la economía china crezca más despacio y se oriente hacia energías más limpias.
El informe de la AIE, que asesora a los países industrializados, contrasta con la opinión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que considera que la demanda de petróleo aumentará mucho después de 2030 y reclama inversiones multimillonarias en el sector.
En su informe anual Perspectivas de la Energía en el Mundo, publicado el martes, la AIE afirma que en su escenario basado en las políticas actuales de los países se vislumbran picos en la demanda de petróleo, gas natural y carbón en esta década, la primera vez que esto ocurre.
"La transición a las energías limpias se está produciendo en todo el mundo y es imparable. No es una cuestión de 'si', sino de 'cuándo', y cuanto antes mejor para todos", afirmó Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE.
"Países, empresas e inversores deben apoyar las transiciones hacia energías limpias en lugar de obstaculizarlas".
Aun así, la AIE también afirmó que, tal y como están las cosas, la demanda de combustibles fósiles seguirá siendo demasiado alta para mantener al alcance el objetivo del Acuerdo de París de limitar el aumento de la temperatura media mundial a 1.5 grados centígrados.
"Esto no sólo puede empeorar el impacto climático tras un año de calor récord, sino también socavar la seguridad del sistema energético, que se construyó para un mundo más frío con menos fenómenos meteorológicos extremos", dijo la agencia en un comunicado.
Cambia el papel de China
Para 2030, la AIE espera que haya casi 10 veces más coches eléctricos en circulación en todo el mundo y citó las políticas de apoyo a las energías limpias en mercados clave como un lastre para la futura demanda de combustibles fósiles.
Por ejemplo, la AIE prevé ahora que el 50 por ciento de las matriculaciones de automóviles nuevos en Estados Unidos serán eléctricos en 2030, frente al 12 por ciento de sus previsiones de hace dos años, en gran parte como consecuencia de la Ley de Reducción de la Inflación estadounidense.
La AIE también considera que el papel de China como fuente clave de crecimiento de la demanda energética está cambiando.
Mientras que en la última década China representó casi dos tercios del aumento del consumo mundial de petróleo, el impulso de su crecimiento económico está disminuyendo y el país es una "potencia de energía limpia", según el informe, que añade que más de la mitad de las ventas mundiales de vehículos eléctricos en 2022 se produjeron en China.
La AIE refirió que la clave para una transición ordenada es aumentar la inversión en todos los aspectos de un sistema de energía limpia, en lugar de en combustibles fósiles.
"El fin de la era de crecimiento de los combustibles fósiles no significa el fin de la inversión en combustibles fósiles, pero socava la justificación de cualquier aumento del gasto", señala el informe de la AIE.
Un informe de la OPEP de principios de mes afirmaba que los llamamientos a detener las inversiones en nuevos proyectos petrolíferos eran "equivocados" y "podrían conducir al caos energético y económico".
MLM