Frente al anuncio de que los restaurantes podrán operar durante la ampliación del semáforo rojo en el Estado de México, empresarios y comerciantes solicitaron que también se les considere para una posible reapertura.
Laura Hernández, presidenta del Consejo Coordinador Empresarial (CCEM) Estado de México, señaló que están en riesgo más de 600 mil unidades comerciales, lo que representa aproximadamente 3.9 millones de empleos, es decir, 60 por ciento de los trabajos en la entidad.
“El llamado es a que nos dejen trabajar a la par de los restaurantes, estamos por cumplir un mes de que se reactivó el semáforo rojo en el estado y en la Ciudad de México y al momento no hay señales de un impacto positivo, aún con la actividad económica detenida”.
Consideró que el comercio formal no representa un riesgo para la salud de la población porque han acatado e implementado las medidas sanitarias necesarias y resaltó la importancia de nuevas estrategias de salud.
Por otro lado, señaló que mantener los negocios cerrados también afecta a la recaudación fiscal federal, estatal y municipal, “en estos momentos sirve para hacer frente a la pandemia, no olvidemos que de donde más se recauda es de los impuestos que se generan en el sector formal de la economía”.
En este sentido, puntualizó que el sector aporta al territorio mexiquense aproximadamente 13 mil millones de pesos anuales con el pago del impuesto sobre nómina, mientras que a nivel federal de enero a octubre de 2020 fue poco más de 124 mil millones de pesos.
Por ello, para enfrentar las pérdidas económicas, y solventar el pago de impuestos por los cuales no ha habido condonaciones ni apoyos, reiteró, es fundamental de que les permitan reincorporarse de forma ordenada y controlada a sus actividades.
“Se entienden la situación de que tengan que seguir en semáforo rojo, no piden regresar a verde, sino que se permita un esquema que ya se había propuesto para una reapertura controlada, en horarios, aforos, días de operación y que podría ser una solución”.
MMCF