La administración Biden aumentó de manera drástica los aranceles sobre las importaciones chinas, que van desde vehículos eléctricos a celdas solares, en un esfuerzo antes de las elecciones por proteger los empleos en Estados Unidos.
La Casa Blanca indicó que 18 mil millones de dólares de productos chinos se verán afectados por los aumentos, que “se dirigen a sectores estratégicos” y están diseñados para que las empresas locales ganen tiempo para enfrentar la competencia en tecnología verde.
“Los aranceles son una señal de que Biden no está dispuesto a permitir que Xi Jinping secuestre sus planes para una transición ecológica ‘made in America’ (hecha en Estados Unidos)”, dijo Brad Setser, experto en comercio del Consejo de Relaciones Exteriores.
En una de las medidas más importantes, EU este año va a cuadruplicar el arancel sobre los vehículos eléctricos chinos hasta ciento por ciento. También triplicará el impuesto sobre importaciones de acero y aluminio. La tasa sobre los chips chinos se duplicará a partir de 2025, y el de celdas solares se duplicará este año hasta 50 por ciento.
Desde el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca, frente a líderes de varios sindicatos estadunidenses, Biden dijo que China había cometido “trampas” al emplear prácticas comerciales desleales, incluso para los vehículos eléctricos, y también con ciberespionaje. “Ya sea de gasolina, eléctricos o híbridos, nunca permitiremos que China controle injustamente el mercado de estos automóviles, punto”, advirtió.
De acuerdo con el centro de estudios CSIS, solo 2 por ciento de las importaciones estadunidenses de vehículos eléctricos provienen de China, pero los aranceles más elevados están diseñados para dificultar aún más que China logre ganar una posición establecida.
Donald Trump, el candidato republicano en las elecciones presidenciales de noviembre, acusó a Biden de actuar con demasiada lentitud y de no ir lo suficientemente lejos.
“¿Dónde han estado durante tres años y medio? Debieron hacerlo hace mucho tiempo”, dijo.
Más tarde, Biden respondió que estaba adoptando un “enfoque inteligente” en comparación con la forma en que Trump había manejado a China, diciendo que su predecesor había hecho poco para aumentar las exportaciones estadunidenses e impulsar la manufactura nacional. “No hizo ninguna de las dos cosas, fracasó”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China advirtió que Pekín “se opone a los aumentos unilaterales de aranceles que violan las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar sus legítimos derechos e intereses”.
Washington también triplicará los aranceles sobre las baterías chinas de iones de litio para vehículos eléctricos hasta 25 por ciento este año. Tomará una medida similar para las baterías de iones de litio para vehículos no eléctricos a partir de 2026. Según los funcionarios, fue diseñada para dar a las compañías estadunidenses más tiempo para desarrollar la tecnología.
Altos funcionarios de EU negaron que el cambio esté relacionado con las elecciones presidenciales. “Esto no tiene nada que ver con la política”, dijo uno.
En los últimos meses, Biden ha tomado medidas diseñadas para apuntalar los votos entre los trabajadores sindicalizados antes de las elecciones de noviembre.
Los funcionarios estadunidenses dijeron que muchos de los sectores objetivo son los mismos que las áreas de energía limpia a las que Biden les dio prioridad para el desarrollo a través de leyes entre las que se encuentran la Ley de Chips y la Ley de Reducción de la Inflación.
Un funcionario dijo que EU no intenta “socavar” el desarrollo de China ni perjudicar los esfuerzos que Washington y Pekín realizaron para estabilizar las relaciones desde que Biden se reunió con Xi Jinping en noviembre.
Greta Peisch, que hasta hace poco se desempeñaba como abogada general en la Oficina del Representante Comercial de EU, dijo que aumentar los aranceles a los vehículos es importante para la industria estadunidense.
“Es importante que nuestras empresas sepan que sus inversiones no se verán socavadas por una afluencia de importaciones de China en uno, dos o muchos años”, dijo Peisch, que ahora trabaja en el bufete de abogados Wiley.
El sindicato United Steelworkers dio la bienvenida a los aranceles. “Las políticas comerciales chinas han tenido un enorme impacto negativo en nuestros miembros”, dijo David McCall, presidente internacional del grupo.
Los grupos empresariales expresaron su preocupación y señalaron que Biden no redujo ni eliminó ninguno de los aranceles que se introdujeron durante la administración de Trump.
“Estamos decepcionados con el resultado porque conservar los aranceles e imponer más hace que sea más difícil para las empresas estadunidenses competir en EU y en el extranjero”, dijo Craig Allen, presidente de US-China Business Council.
El canciller alemán, Olaf Scholz, señaló que al menos 50 por ciento de las exportaciones de vehículos eléctricos de China provienen de marcas occidentales que tienen fábricas en el país.
“Los fabricantes europeos y algunos estadunidenses tienen éxito en el mercado chino y también venden a China una gran cantidad de vehículos fabricados en Europa”, dijo Scholz.
Sin embargo, la Comisión Europea también está investigando las importaciones de vehículos eléctricos procedentes de China y se espera que aumente los aranceles en los próximos meses.
Con información de: Joe Miller en Nueva York, Kana Inagaki en Tokio, Wenjie Ding en Beijing, Gloria Li en Hong Kong y Arjun Neil Alim en Fráncfort