Los minoristas británicos no esenciales se sumieron en una crisis profunda, ya que la preocupación por una cepa más infecciosa de coronavirus provocó nuevos cierres de tiendas en el sureste de Inglaterra, así como restricciones en la frontera.
Frasers Group, de Mike Ashley, cuyas marcas incluyen Sports Direct y Evan Cycles, retiró la pauta de utilidades que presentó apenas hace 10 días, citando “la alta probabilidad de que se produzcan más confinamientos en toda la nación durante los próximos meses”.
El precio de las acciones de Frasers cayó 10 por ciento la mañana de ayer, mientras que las de las tiendas de moda rivales Next, Ted Baker y Superdry también fueron golpeadas. Superdry perdió 12 por ciento, mientras que Next cayó alrededor de 5 por ciento.
Mark Cotter, director ejecutivo de Baird Group, que dirige las concesiones de Ben Sherman y Jeff Banks en Reino Unido, dijo que se prepara para meses difíciles, con las tiendas cerradas “en lo que debería ser la semana más ajetreada del año”.
La rápida propagación en Gran Bretaña de una nueva cepa del coronavirus llevó al gobierno a anunciar el sábado pasado el cierre de grupos de comercio minorista no esenciales y de esparcimiento en Londres, así como en el sureste y este de Inglaterra.
Los estrictos confinamientos se producen durante el periodo máximo de comercio en la etapa previa a la Navidad. Helen Dickinson, directora ejecutiva del grupo comercial British Retail Consortium, indicó que el impacto será “severo” para un sector que se prepara para perder alrededor de 2 mil millones de libras por semana en ventas.
Añadió que el “enfoque de empezar y parar” del gobierno había sido “poco útil”, ya que a algunas tiendas volvieron a cerrar apenas dos semanas después de que se levantó el confinamiento.
Las restricciones más recientes serán un golpe para varios minoristas —entre ellos Arcadia, propietario de Topshop, Debenhams y Edinburgh Woolen Mill— que ya habían caído en administración y esperaban maximizar el comercio durante la temporada navideña.
Los centros de esparcimiento y gimnasios, a los que anteriormente se les había permitido permanecer abiertos, también tuvieron que cerrar en áreas que se encuentran bajo las nuevas medidas de nivel 4. Las acciones de The Gym Group, la compañía de gimnasios más grande que cotiza en bolsa en Reino Unido, cayeron 6 por ciento ayer por la mañana.
Huw Edwards, director ejecutivo del organismo comercial UKActive, afirmó que el anuncio de nuevas restricciones fue “desesperadamente difícil” para el sector, sobre todo cuando entre en su periodo comercial clave de enero, cuando la demanda de nuevas membresías suele ser más alta.
“No estar abiertos durante esta temporada, al tener en cuenta los largos periodos de cierre en 2020 y la falta de apoyo sectorial a medida, será devastador”, dijo.
Humphrey Cobbold, director ejecutivo de PureGym, señaló que la compañía cerró 105 sitios con poco más de dos horas de anticipación antes de que el gobierno hiciera su anuncio el sábado.
“Entras muy rápido en una pandemia o en un confinamiento, pero sales muy lento, así que tendremos que luchar y abrirnos camino para salir de esto”, dijo, y agregó que esperaba que parte del alivio de las tarifas comerciales que los supermercados pagarán se redirija hacia las industrias de esparcimiento que resultaron más afectadas.
Después de un primer confinamiento en la primavera, las tiendas minoristas no esenciales en Reino Unido se vieron obligadas a cerrar de nuevo durante gran parte de noviembre, ya que el gobierno buscaba frenar una segunda ola de contagios.
Primark, que no vende ropa en línea, indicó que cerca de un tercio de sus tiendas en Inglaterra se encuentran cerradas, con sitios también cerrados en Alemania y Países Bajos. La situación sigue siendo “mucho mejor” que en la primavera, afirmó, cuando todas sus tiendas estaban cerradas.
El creciente apetito de los consumidores por las compras en línea era un problema para las tiendas físicas incluso antes de la pandemia, pero los confinamientos y el distanciamiento social llevaron a peticiones de ayuda de la industria.
Paul Marchant, director ejecutivo de Primark, pidió un “periodo de IVA cero” a medida que se despliega la vacuna contra el coronavirus en Reino Unido. Además escribió en The Times este mes que deben flexibilizarse las leyes de comercio de los domingos y que el gobierno debe considerar un esquema de “comprar para ayudar”.
Cotter afirmó que aún intentaba calcular qué tanto de las ventas perdidas en las tiendas se van a trasladar a ser en línea, pero señaló que es demasiado tarde para pedir regalos a tiempo para Navidad. “Esta semana ya se cerró”, dijo.
Los minoristas también se enfrentarán a la disrupción de la cadena de suministro después de que varios países suspendieron los viajes desde Reino Unido debido a una nueva cepa del virus.
El British Retail Consortium advirtió que, aunque técnicamente aún pueden ingresar mercancías desde Francia, es poco probable que las compañías de transporte envíen camiones y choferes a Reino Unido debido a la incertidumbre sobre si podrán regresar.
Con información de: Alice Hancock, Sarah Provan y Harriet Clarfelt
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Hay problemas con el pacto: Johnson
El primer ministro británico, Boris Johnson, dijo que aún hay problemas para llegar un acuerdo comercial con la Unión Europea después del brexit, pero que Gran Bretaña prosperará incluso sin un pacto. “La posición no ha cambiado: hay problemas”, dijo Johnson a periodistas cuando se le preguntó si habrá un acuerdo. “Es vital que todo el mundo entienda que Reino Unido tiene que ser capaz de tener control total de sus propias leyes y también que tenemos que ser capaces de controlar nuestras propias pesquerías”. A menos que Johnson llegue a un acuerdo en los próximos 10 días, Reino Unido dejará el bloque el 31 de diciembre.