Bunge, la empresa agroindustrial mundial, canceló una parte sustancial de una gran adquisición de aceites comestibles que estaba destinada a impulsar las ventas de ingredientes alimentarios de alto margen de la compañía.
El cargo por deterioro del fondo de comercio por 76 millones de dólares se produce menos de dos años después de que la compañía que cotiza en EU cerró su compra de 946 mdd de una participación mayoritaria en IOI Loders Croklaan bajo el ex director ejecutivo Soren Schroder. Loders produce palma y otros aceites tropicales, que Schroder dijo que acelerarían el crecimiento en las ventas de productos de valor agregado para lo que históricamente ha sido un negocio de materias primas.
Greg Heckman reemplazó a Schroder a principios de 2019, después de que los inversores activistas fijaron la mira en la empresa. Ayer Heckman dijo que las ventas de Loders no estaban creciendo tan rápido como se esperaba.
La amortización fue una entre una serie de cargos y artículos especiales que llevaron a la compañía a una pérdida neta en el cuarto trimestre de 2019 de 51 millones de dólares en comparación con las pérdidas de 65 mdd del año anterior.
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Ajustado por estos artículos, Bunge ganó 1.27 dólares por acción, en comparación con los 8 centavos del año anterior y casi 1 dólar por acción más que las estimaciones de los analistas. La utilidad operativa ajustada aumentó más del doble, 283 millones de dólares en el trimestre, en comparación con 107 mdd.
La mayor parte de las ganancias operativas provino del comercio de granos en Sudamérica, donde Bunge ha sido un jugador importante desde el siglo XIX, indicó la compañía.
El cargo de Loders se produjo después de la prueba anual de la compañía del valor de sus activos, no por un evento específico, dijo John Neppl, director financiero de Bunge. Heckman agregó que la adquisición era muy prometedora para Bunge, con la demanda de aceites vegetales para como los sustitutos de carne de origen vegetal, por ejemplo.
“Nos encanta el negocio porque las grasas y aceites están de moda”, dijo Heckman, y calificó la compra de Loders como “una oportunidad maravillosa”.