Empresas reducirán viajes de negocios en avión para combatir el cambio climático

FT MERCADOS

Pondrán su granito de arena.

Viajar en avión por motivos de trabajo es cada vez más complicado en las grandes empresas. (Shutterstock).
Pilita Clark
Ciudad de México /

El grupo de seguros Swiss Re tiene 14 mil empleados repartidos por todo el mundo y si alguno de ellos quiere volar a algún lugar por trabajo este año, va a necesitar una buena razón. 

Para poner su granito de arena en la lucha contra el cambio climático, la compañía decidió que en 2022 sus emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de los viajes aéreos sean la mitad que en 2018. Este objetivo se sumó a los factores utilizados para asignar los bonos de la compañía de seguros. 

Viajar en avión por motivos de trabajo es cada vez más complicado en otras grandes empresas. En Novo Nordisk, el personal que dirige un programa de ayuda a los niños con diabetes notó el impacto del nuevo objetivo de la empresa de reducir a la mitad las emisiones de sus viajes en avión para 2025. 

Por su parte, EY incorporó la teoría del empujoncito —la idea de que pequeños cambios de diseño pueden modificar el comportamiento— a sus sistemas internos de reservación de viajes para empujar a su personal a realizar viajes más ecológicos. 

“Por ejemplo, si reservan un vuelo que regresa el mismo día, los animamos para que la reunión sea en línea en lugar de física”, dice Steve Varley, vicepresidente mundial de sustentabilidad de EY. 

La pregunta es: ¿por qué no hay más empresas que copien a Swiss Re, Novo Nordisk y EY? 

Estas tres empresas se encuentran entre las ocho que obtuvieron la máxima calificación de A en la clasificación de los grupos ecológicos. Eso significa que tomaron medidas para establecer un objetivo específico de reducción de emisiones en los viajes en poco tiempo. 

La aviación solo representa alrededor de 2 por ciento de las emisiones mundiales de CO2. Pero ese porcentaje podría aumentar si se reanudan las tendencias de crecimiento anteriores a la pandemia

La clasificación de los viajes aéreos no pretende prohibir totalmente los vuelos de negocios, ni castigar a los empleados. 

La cuestión es que tiene sentido que las compañías mantengan los hábitos de viaje más ecológicos que adquirieron durante la pandemia. Algunas empresas demuestran que es posible hacerlo. Muchas más podrían hacer lo mismo.


srgs

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