Un alto funcionario de la Reserva Federal advirtió que EU es más vulnerable a los choques inflacionarios que en el pasado, mientras las empresas se preparan para un mayor proteccionismo y una avalancha de nuevas políticas económicas cuando Donald Trump regrese a la Casa Blanca.
Tom Barkin, presidente de la Fed de Richmond, declaró al Financial Times que espera que la inflación siga cayendo en la economía más grande del mundo, a pesar de que el progreso se estancó, de acuerdo con los datos mensuales publicados por las agencias gubernamentales.
Pero advirtió que las empresas trasladan los costos a los consumidores con mayor facilidad que en el pasado, aunque en una medida mucho menor que en el punto máximo de la pandemia de coronavirus, algo que tuvo un impacto en los precios.
“Somos de cierta manera más vulnerables a los choques de costos del lado de la inflación, ya sea que estén relacionados con los salarios o de otro tipo, de lo que podríamos haber sido hace cinco años”, dijo Barkin, quien es miembro con derecho a voto en el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) que fija las tasas este año.
El presidente de la Fed de Richmond, que alguna vez fue el director de riesgos del gigante de la consultoría McKinsey, también señaló que las empresas están “preocupadas” por los efectos inflacionarios de los aranceles de gran alcance y los planes de deportación de inmigrantes indocumentados que Trump promocionó durante la campaña electoral.
“Puedo entender por qué las empresas piensan eso”, dijo Barkin, pero señaló que otras políticas de Trump relacionadas con el impulso a la producción nacional de energía “podrían ser desinflacionarias”.
A muchos economistas también les preocupa que los gravámenes universales a las importaciones estadunidenses reaviven la inflación, pero el alcance del impacto dependerá de las políticas que se adopten y de cómo se implementen. También advierten que las deportaciones masivas podrían causar aumentos de precios y obstaculizar el crecimiento, lo que provocaría una crisis de estanflación.
Trump y sus asesores económicos rechazan estas advertencias y dicen que, junto con la desregulación y los recortes de impuestos, sus políticas fortalecerán la economía y mantendrán la inflación bajo control.
Barkin argumentó que la Fed no debería ajustar de manera preventiva la política monetaria antes de posibles cambios en la política económica. “No deberíamos tratar de resolverlo antes de que suceda”, dijo.
Los funcionarios de la Fed ya recortaron las tasas de interés dos veces este año y debaten si deben volver a hacerlo en su última reunión en diciembre. El presidente Jay Powell reiteró la semana pasada que el banco central no tiene “prisa” por reducir las tasas a un nivel que restrinja el crecimiento, dada la fortaleza subyacente de la economía.
Los operadores en los mercados de futuros de fondos federales predicen que las probabilidades de un recorte de la tasa de un cuarto de punto al 4.25 - 4.5 por ciento son aproximadamente iguales.
Barkin dijo que no quiere “prejuzgar diciembre”, pero agregó que las próximas decisiones sobre las tasas van a depender de los datos, que actualmente sugieren que la economía es “bastante próspera”.
“Si la inflación se mantiene por encima de nuestro objetivo, eso justifica que seamos cuidadosos con la reducción de las tasas”, dijo. “Si el desempleo se acelera, eso justifica que seamos más agresivos”.
Barkin describió las recientes medidas de política monetaria de la Fed como una “recalibración” y dijo que las preguntas sobre el ritmo de los recortes de las tasas de interés serán más relevantes una vez que el banco central entre en una “fase de normalización” y sus ajustes de política monetaria estén más cerca de un nivel “neutral”.
El miércoles, la gobernadora de la Fed, Michelle Bowman, quien fue la única disidente de la decisión de la Fed de recortar las tasas en medio punto en septiembre, respaldó la adopción de medidas “cautelosas” para reducir las tasas de interés. La gobernadora Lisa Cook también respaldó el miércoles un ritmo gradual de recortes.