Europa se enfrenta a la escasez de materiales de construcción, ya que las empresas interrumpieron su producción debido al aumento de los costos de la energía y a las “caóticas” políticas de la Unión Europea, advierte el director del mayor fabricante de ladrillos del mundo.
Heimo Scheuch, director ejecutivo de la empresa austriaca Wienerberger, que fabrica tejas y tuberías además de ladrillos, dijo que muchos de los rivales más pequeños de la compañía se vieron obligados a cerrar plantas, lo que afecta la producción.
“Literalmente cerraron las operaciones durante los meses de invierno, lo que conduce a un desabastecimiento”, declaró para Financial Times.
“Tenemos que ser cuidadosos, porque si no tenemos una demanda que aumenta demasiado y que no podemos satisfacer de un día para otro. Es un terreno nuevo para nosotros”.
Su advertencia se produjo después de que la invasión a Ucrania por parte de Rusia desencadenara una mayor volatilidad en los mercados de gas natural, algo que hizo que los precios europeos al mayoreo para la entrega al día siguiente subieran 38 por ciento el viernes, hasta 205 euros por megavatio hora, lo que supone un aumento de nueve veces respecto a hace un año.
Scheuch dijo que las operaciones de Wienerberger en Rusia, que incluyen dos plantas de ladrillos, no se han visto afectadas por la invasión a Ucrania hasta ahora.
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Pero advirtió que una guerra prolongada puede afectar las decisiones de negocio e inversión en la construcción en toda Europa y Norteamérica.
Los contratistas británicos ya informan de la escasez de materiales, como ladrillos, tejas y productos de plástico, que puede empeorar si la guerra en Ucrania provoca nuevos incrementos de los precios de la energía, lo que generará retrasos en la construcción de viviendas y plantas industriales.
Además de los combates en Ucrania y de los precios récord del gas, los contratistas de la construcción de toda Europa luchan contra la inflación y la escasez de mano de obra cualificada.
Esto condujo a quiebras en países como Reino Unido, donde cientos de empresas del ramo se van a la bancarrota cada mes ante el alza de precios y la poca mano de obra cualificada.
Scheuch afirmó que las “caóticas” políticas de la Unión Europea en materia de energía, sobre todo en lo que respecta a la reducción de las emisiones de carbono, y en mano de obra carecen de cohesión, lo que provoca la escasez. “El problema en Europa es que tenemos un enfoque caótico y esto nos perjudicará”.
Mientras que Wienerberger compró por adelantado cerca de 90 por ciento de su gas para 2022, empresas de países como España, Italia y Polonia se ven obligadas a realizar recortes de producción debido al aumento de los costos de la energía.
Grespania de España ha recortado su producción anual de azulejos cerámicos en 15 por ciento desde el pasado noviembre. El director ejecutivo, Luis Hernández, dijo que el objetivo de la Unión Europea de reducir las emisiones en por ciento para 2030 resultará en la “destrucción de las industrias cerámicas de España, Italia y Polonia”, ya que los altos precios del gas y el carbono agotan el dinero necesario para descarbonizar los hornos.