Kraft Heinz, la compañía de alimentos con el respaldo de Warren Buffett, dio a conocer otras depreciaciones por valor de mil 200 millones de dólares, que se suman al cargo de 15 mil mdd que sufrió el año, en un reflejo de cómo los compradores se alejan de sus marcas.
- Te recomendamos Kraft Heinz reformula resultados a medida que se amplía indagatoria Financial Times
Sus acciones cayeron 13 por ciento ayer por la mañana, lo que lleva su retroceso en el año a 38 por ciento. La compañía, cuyos productos incluyen la salsa de tomate Heinz, los macarrones y queso Kraft, y la salsa HP, indicó que las utilidades del primer semestre se redujeron a la mitad en comparación con el ciclo anterior.
El grupo con sede en Chicago prometió transformar la industria de alimentos cuando se creó en 2015 por medio de la combinación de Kraft y Heinz en un acuerdo que diseñó la firma de inversión 3G Capital y Buffett. Pero desde entonces se convirtió en la imagen de las empresas de bienes de consumo que tienen problemas. Los productos que han sido un pilar en los hogares durante generaciones están pasando de moda.
Además de eso, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos(SEC, por su sigla en inglés) investiga a la compañía por su contabilidad.
El nuevo director ejecutivo de Kraft Heinz, Miguel Patricio, con 40 días en el cargo, aceptó ayer que “el nivel de la caída en comparación con el año anterior no es algo que nos haga sentir orgullosos”. El ingreso neto en los seis meses hasta finales de junio cayó de mil 760 millones de dólares hace un año a 852 mdd.
Los últimos cargos no monetarios incluyeron una amortización de fondo de comercio de 744 millones de dólares que, según Kraft Heinz, reflejaba “pronósticos operativos a cinco años” reducidos para varios de sus negocios internacionales. La compañía también reservó un cargo de 474 mdd por activos intangibles citando “una tasa de descuento más alta para reflejar el riesgo percibido de los mercados en la valoración de la compañía”.
La depreciación de 15 mil millones de dólares a principios de este año se debió a las perspectivas sombrías para algunas de sus marcas más conocidas, incluidas las de carnes Kraft y Oscar Mayer. Kraft Heinz reintegró casi tres años de ganancias luego de que en una investigación interna se descubrieron errores en la forma en que había contabilizado los contratos con los proveedores. Una investigación interna señaló la mala conducta de los empleados en las adquisiciones.
David Knopf, director financiero, insistió ayer en que la compañía lleva a cabo “medidas exhaustivas” para fortalecer los controles internos, incluyendo los informes financieros.
Patricio, quien fue reclutado del grupo cervecero Anheuser-Busch InBev para reemplazar a Bernardo Hees, afirmó que la compañía aún tiene un futuro brillante en el largo plazo. “Nuestras marcas son íconos”, dijo y señaló que muchas de ellas existen desde hace más de un siglo.
Las ventas netas en los seis meses hasta finales de junio cayeron 4.8 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior a 12 mil 400 millones de dólares. Sobre una base orgánica, que excluye el impacto de la moneda, adquisiciones y las desinversiones, las ventas netas cayeron 1.5 por ciento.
Los precios promedio de sus productos cayeron 1.3 puntos porcentuales debido a las reducciones de tarifas y el “desfavorable tiempo de promociones” en Norteamérica, dijo.
Las dificultades en Kraft Heinz condujeron a examinar el enfoque sobre los gastos de 3G que alguna vez fue tan alardeado, y los críticos de Wall Street se quejaron de que ha dependido demasiado de los recortes de costos para impulsar los rendimientos.
“Sin esta disciplina actualmente estaríamos en un lugar peor”, dijo Patricio. “Pero tenemos que hacer más que eso”. Expresando su compromiso con las “inversiones consistentes”, dijo que el consejo de administración “ordenó un nuevo enfoque”.
Las depreciaciones anteriores de Kraft Heinz arrastraron a Berkshire Hathaway, un importante accionista, de Warren Buffett a una de las mayores pérdidas trimestrales de su historia. Buffett dijo desde entonces que Berkshire “pagó en exceso” por su interés en Kraft.
En el último retraso en sus estados financieros, la compañía también indicó ayer que no podía presentar su informe trimestral completo ante la SEC en la fecha establecida prescrita.
CLAVES
MALA RACHA
La compañía con sede en Chicago reportó su duodécimo trimestre seguido de ventas mediocres.
DERRUMBE
El reporte de ganancias, retrasado por una investigación sobre las prácticas contables de la empresa, tiró las acciones 10.07%.
MENOS COMPRAS
Las ventas netas descendieron alrededor de 5% a 12 mil 370 millones de dólares.
MRA