Google despidió a cuatro trabajadores acusados de abusar de su cultura de apertura radical, lo que intensificó la lucha contra los activistas en su personal que hacen campaña contra parte del trabajo que se realiza para el gobierno de Estados Unidos (EU).
Los despidos se produjeron después de que, en una investigación interna, la compañía encontró que los exempleados tuvieron acceso al trabajo o los calendarios de otros trabajadores. “Esta no es la forma como funciona la cultura abierta de Google, o como alguna vez tuvo la intención de funcionar”, dijo la compañía en un correo electrónico interno al personal, del cual el primero en informar fue Bloomberg.
Google se encuentra en una lucha con activistas en su personal, que se oponen a trabajar en lo que creen que va en contra de los valores éticos básicos de la compañía.
Esto incluye trabajar con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EU. El año pasado, Google decidió no renovar el Proyecto Maven, una tarea de reconocimiento de imágenes que involucra drones del ejército estadounidense, después de las protestas de trabajadores.
La compañía dijo que los empleados despedidos estuvieron involucrados en “violaciones claras y repetidas de nuestras políticas de seguridad de datos”, incluso después de recibir una advertencia.
El Dato.4 personas
fueron dadas de baja de la plantilla laboral de Google
No reveló los nombres de los trabajadores que fueron cesados, pero Rebecca Rivers, quien se había opuesto al trabajo de Google para la Aduana de EU y fue suspendida recientemente, escribió en Twitter que le habían dicho que la “estaban despidiendo”.
La semana pasada, varios trabajadores de Google en San Francisco realizaron una manifestación en favor de Rivers y Laurence Bernard, otro trabajador que fue suspendido, para protestar por lo que, afirman, era una ofensiva contra la disidencia interna.
Google dijo que los cuatro trabajadores que fueron despedidos participaron en “búsquedas sistemáticas de material y trabajo de otros empleados”, y que parte de la información que recopilaron se distribuyó fuera de la empresa.
La compañía tecnológica siempre se ha enorgullecido de tener una cultura interna abierta que alienta a los trabajadores a decir lo que piensan y les ofrece acceso abierto a la información en toda la empresa, incluso si no tiene relación con el trabajo de un empleado en particular.
En una señal de cómo las tensiones con los trabajadores obligan a un cambio en su cultura, Google instó al personal a tener más cuidado con la información interna.
Dijo que los trabajadores despedidos aprovecharon la información “fuera del alcance de sus trabajos”, algo que no había sido un límite para los trabajadores en el pasado.
En un ejemplo del tipo de información de la que se abusó, la empresa dijo que uno de los trabajadores despedidos accedió a los calendarios de otros empleados y estableció notificaciones automáticas “que daban detalle del trabajo y el paradero de esos empleados, incluyendo asuntos personales”.
Las medidas enérgicas se producen después de otros esfuerzos de la compañía para ajustar su cultura frente a las crecientes tensiones internas. En agosto, advirtió a los trabajadores que bajarán la temperatura del debate en sus tableros de mensajes internos. Esto incluyó un llamado a poner fin a los ataques personales contra otros trabajadores, y ser más cuidadosos al plantear preguntas sobre el tipo de trabajo que Google lleva a cabo.