Rolls-Royce logró un arreglo para las demandas de compensación con todas las líneas aéreas clientes de su problemático motor Trent 1000 que probablemente sufran una interrupción de vuelo en los próximos dos años, de acuerdo con el director ejecutivo del grupo de motores de aviones que pertenece al FTSE 100.
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Warren East intentó tranquilizar a los inversionistas en su reunión anual de que se logró contener los costos de los problemas de larga duración en el plan de motores que impulsa el avión comercial 787 Dreamliner de Boeing.
Rolls-Royce en febrero elevó en alrededor de 100 millones de libras su estimación de los costos en efectivo del programa Trent 1000 fueran para ubicarlos en alrededor de mil 500 millones de libras entre 2017 y 2021.
Al dirigirse a los inversores en la reunión de Rolls-Royce en Bristol, East dijo que “una parte significativa” de esa suma de mil 500 millones de libras se “relacionaba con compensaciones”.
“Ahora llegamos a un arreglo en las demandas de compensación con todas las aerolíneas que resultarán afectadas en los próximos dos años”, dijo a los inversores, varios de los cuales cuestionaron el manejo sobre el tema.
A Rolls-Royce le han perseguido los problemas con el Trent 1000, que llevó a la compañía a manejar números rojos el año pasado y amargó las relaciones con las aerolíneas clientes como British Airways, que vio alterados sus horarios de vuelos.
Tuvo que embarcarse en un extenso programa de reparaciones y rediseñar algunos componentes luego de que las palas de la turbina en ciertas variantes del motor se erosionaran más rápido de lo esperado.
East dijo que el número de aviones afectados que se tuvo que dejar en tierra bajó de entre 40 a 50 en la segunda mitad del año pasado a entre 30 y 40 en el primer trimestre. Se espera que ese número esté en un solo dígito para finales de este año.
Rolls-Royce también comenzó a obtener nuevos pedidos para el Trent 1000, en comparación con “una sequía total el año pasado”, dijo más tarde East en el marco de la reunión.
“Las aerolíneas pueden ver ahora que los problemas comienzan a quedar atrás”, agregó, aunque advirtió que los clientes todavía estaban registran disrupciones.
Rolls-Royce dijo anteriormente que las operaciones permanecían “en línea” con sus expectativas y que mantenía la confianza en su orientación anterior para un flujo de efectivo disponible de 700 millones de libras, más menos 100 millones de libras, para todo el año.
Sin embargo, espera que las fases del flujo de efectivo tengan “una fuerte inclinación en el segundo semestre”.
East dijo en la reunión que la compañía tenía “motores en espera para llegar a los aviones”, pero todavía no los entrega, por lo que parte del efectivo llegará en la segunda mitad del año.
La compañía se encuentra en medio de un ambicioso plan de reestructuración con el que se van a recortar 4,600 puestos de trabajo de mandos medios en un intento por simplificar su estructura y mejorar el desempeño operativo.
Ian Davis, presidente de Rolls-Royce, dijo que los problemas con el Trent 1000 fueron “una gran distracción”, pero insistió en que la transformación en el grupo “no es negociable”.
MRA