Industrias Peñoles negó las acusaciones del gobierno de Estados Unidos de que en su filial "Minera Tizapa" entorpecen los derechos de los trabajadores a la libertad de asociación sindical y negociación colectiva.
Después de que ayer la oficina de la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai anunciara que ha solicitado formalmente a México la revisión del caso conforme al Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida (MLRR) del T-MEC, hoy la empresa minera sacó un comunicado en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en el que reiteró que siempre respeta y continuará respetando la libertad de asociación sindical y negociación colectiva de sus trabajadores.
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Además, señaló que contribuirán activamente con las autoridades mexicanas para que realicen las investigaciones correspondientes con dicho centro de trabajo.
"Confiamos plenamente en los procedimientos establecidos por el T-MEC para obtener una pronta solución del caso", concluyó la empresa.
Ayer, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) pidió al gobierno de México revisar los derechos laborales en Minera Tizapa, proyecto extractivo de Industrias Peñoles ubicado en Zacazonapan, Michoacán, esta petición marca la número 22 que la administración de Joe Biden hace al mecanismo del tratado comercial que comparte el bloque de América del Norte.
Esto después de que el pasado 4 de marzo, el Comité Laboral Interinstitucional para el Monitoreo y la Aplicación (ILC) recibió una petición al MLRR del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (Los Mineros), un sindicato mexicano independiente, donde alegaban que Industrias Peñoles cometió actos de interferencia del empleador en los asuntos sindicales, al despedir a varios trabajadores en represalia por su actividad sindical.
Además de que demostraron favoritismo hacia el sindicato actual, como pagar un bono especial solo a sus afiliados. Y tras una revisión a la petición determinó que existe evidencia suficiente y creíble de una denegación de derechos que permite la invocación de buena fe de mecanismos de aplicación.
“Al activar el mecanismo de respuesta rápida, estamos reafirmando los derechos de los trabajadores a afiliarse libremente al sindicato de su elección y participar en actividades sindicales sin discriminación ni represalias. La acción de hoy desbloquea la promesa del T-MEC para los trabajadores que han sido despedidos ilegalmente, así como para aquellos que temen ser los siguientes”, dijo Tai.
Tras esta nueva solicitud, México tiene 10 días, a partir de ayer, para aceptar realizar una revisión y, si está de acuerdo, 45 días para completar la revisión, pero hasta el momento no se ha seguido con dicha parte del proceso.
srgs