Ante la propagación de la pandemia del coronavirus Covid-19, miles de personas en México recurrieron a las compras de pánico en los supermercados del país, y uno de los productos de limpieza que más buscaban los consumidores, además del papel higiénico, se encontraba el desinfectante Lysol.
Ya sea en su presentación de toallitas desinfectantes, aerosoles o gel antibacterial, el producto se agotó rápidamente; sin embargo, pocos conocen la historia de este producto de limpieza que se ha vuelto la primera opción para muchos mexicanos en cuestion de higiene.
El producto forma parte actualmente de la compañía británica Reckitt Benckiser, pero su historia ya suma 125 años. En 1889, Lysol introdujo su primer desinfectante ante una epidemia de cólera en Europa, lo cual lo popularizó como un producto indispensable ante las epidemias.
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Ya en 1918, la marca reforzó su imagen como un producto de limpieza eficaz contra el virus de la gripe. Entre sus éxitos más importantes se encuentra el lanzamiento del desinfectante líquido, que rápidamente se distribuyó en farmacias y hospitales.
Ante la crisis sanitaria de este 2020, es utilizado en escuelas, hogares y empresas de México y en otras partes del mundo.
lvm