Después de dos años de crisis por pandemia, el 10 de mayo representa un impulso para la actividad restaurantera al registrarse un repunte en el consumo de alimentos preparados de 35 a 40 por ciento.
Así lo expuso Felipe Mendoza Torres, director de la Asociación Poblana de Restaurantes y Prestadores de Servicios A.C (Aprepsac) al señalar que en esta fecha el consumo por persona oscila entre los 130 a más de 500 pesos.
Comentó que, a diferencia de hace dos años, cuando se tenían actividades restringidas por la emergencia sanitaria de covid-19, en esta ocasión los establecimientos pueden operar con amplios aforos, por lo que hubo reservaciones para el horario de comida y las personas puedan llevar a cabo un festejo en familia.
Destacó que el 10 de mayo representa una de las mejores fechas para la industria restaurantera, en especial, para los 250 establecimientos adheridos que prepararon cartas especiales y promociones para celebrar a las jefas del hogar.
“Nos pinta un día muy bueno. Hubo ausencia en la mañana, sin embargo, para la hora de comida comienza a llegar la gente. Después de dos años, este 10 de mayo es el más importante que tenemos. En 2020 y 2021 casi no tuvimos nada, hubo servicio a domicilio, pero siempre lo mejor es ofrecer el servicio al cliente. Hubo reservaciones de diez a doce personas”, comentó.
Por otra parte, el director de la Aprepsac señaló que la actividad en la industria restaurantera se retoma de manera paulatina, toda vez que el factor inflacionario con ajuste en los precios de los alimentos impacta en la recuperación de la plantilla de trabajadores y utilidades.
AFM