Ante la debilidad de los ingresos fiscales recurrentes, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp) hizo un llamado a reducir los gastos que más adelante serán insostenibles y que solo siguen por temas políticos.
“Aun cuando las finanzas públicas arrojan resultados adecuados en un sentido estático, apuntan a la formación de riesgos. Ello por una aparente debilidad de ingresos fiscales recurrentes, una contracción del gasto que puede ser insostenible -más aún en los tiempos políticos que se aproximan- y el pronunciado crecimiento del costo financiero de la deuda pública”, remarcó en su análisis semanal.
Destacó que, de acuerdo con el reporte de la Secretaría de Hacienda en el primer cuatrimestre del año, los resultados generales de las finanzas públicas arrojaron un comportamiento favorable. Los balances presupuestario y primario tuvieron resultados más saludables que los programados.
Sin embargo, dijo que el análisis de los diversos componentes de las finanzas públicas muestra resultados un tanto preocupantes.
Precisó que en abril, los ingresos del sector público aumentaron 4.5 por ciento en términos reales, respecto al mismo mes del año pasado, después de que en marzo cayeron 18.9 por ciento y, evidentemente, esto fue insuficiente para evitar que en el periodo enero-abril los ingresos cayeran en 3.1 por ciento.
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Además, en cada uno de los cuatro primeros meses del año, los ingresos resultaron inferiores a lo programado, acumulando una diferencia de 156 mil millones de pesos.
El CEESP explicó que en abril, los ingresos tributarios fueron 25.4 por ciento superiores en términos reales a los del año pasado, lo que permitió que en el periodo enero-abril reportaron un incremento de 2.6 por ciento. Esto respondió principalmente al aumento de 32.5 por ciento real que la recaudación por concepto del ISR tuvo en abril, como resultado de la ampliación del plazo para la presentación de la declaración anual de las personas morales que regularmente se efectúa en marzo.En enero-abril el aumento anual fue de 3.8 por ciento.
En tanto, agregó, la recaudación de IEPS creció 116 por ciento en abril y 27.7 por ciento en enero-abril, debido a la disminución en los estímulos a los combustibles. En el IVA se observó un incremento anual de 4.9 por ciento en abril, aunque fue insuficiente para evitar que en el periodo enero-abril cayera 3.4 por ciento, lo que sugiere que el consumo no acaba de recuperarse sólidamente.
El centro de estudios abundó que que a excepción del ISR, la recaudación de los demás rubros de impuestos ha sido menor a lo originalmente programado.