Tras la posibilidad de que, al igual que en la Ciudad de México, los restaurantes habiliten una terraza o espacio al aire libre para que puedan incrementar su capacidad de ocupación al 30 por ciento, esto no podría ser factible en Pachuca o Mineral de la Reforma debido a la infraestructura de las calles, así como al mismo clima que prevalece en la capital del estado.
Así lo señaló el empresario del sector, Eduardo Quiroz Zumano, quien expuso que ya se empieza a plantear esa posibilidad pero sólo la minoría de los restaurantes podría hacer esa modificación.
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“Eso es una utopía que en Pachuca no se podría realizar porque, de primera instancia, al hablar de mesas al aire libre y con el clima que tenemos, serviríamos los platillos helados, además las banquetas no miden más de metro y medio, están disparejas y llenas de hoyos; además que pasa el transporte público a toda velocidad, la cantidad de polvo que llegaría a los alimentos, no se podría.
“En la ciudad sólo habría entre cinco o seis restaurantes que podrían habilitar terraza, así que eso no sería una solución para la mayoría de los restauranteros, es por eso que queremos presentar la propuesta a las autoridades sanitarias de poder hacer una reapertura ordenada”, indicó el empresario y director general del Mirage de Centro Histórico.
En este contexto en el que los restauranteros están enfrentando una caída de ventas mayor al 80 por ciento, en lo que va del regreso a semáforo epidemiológico a rojo por más de dos semanas, Quiroz Zumano pidió empatía a las autoridades para que ellos puedan obtener los recursos suficientes y solventar los gastos que tienen.
“Queremos un término medio, porque también entendemos la situación grave de la pandemia, pero que también a nosotros nos permitan sacar gastos porque es el gobierno federal el que no está brindando el apoyo
“Y es que, a partir de esta semana se tuvo que cubrir cuotas del Seguro Social, así como del Infonavit, pero de dónde si no estamos teniendo ventas”, argumentó.
Confesó que no solo el sector al que pertenece está padeciendo los estragos de la emergencia sanitaria y aseguró que los contagios no se están dando en los restaurantes ya que, en su mayoría, han reforzado las medidas sanitarias que les ha solicitado la Secretaría de Salud para poder abrir sus puertas.
“Los restaurantes no somos fuentes de contagio, se mantienen con tapetes desinfectantes que funcionan, no como en otros lados que ya están secos y nada más están de adorno, además de que se toma la temperatura, se lleva una bitácora, todo lo que nos han solicitado.
“Además hemos participado con los cursos y capacitaciones que nos han solicitado para saber los lineamientos que teníamos que seguir con las y los trabajadores, con la separación de mesas, que hubiese suficiente ventilación, con todas las medidas que han resultado, porque no hay trabajadores enfermos de covid-19 en nuestros restaurantes”, insistió.
Sin embargo, señaló que las medidas no se aplican para los comercios de comida informales que han crecido en esta contingencia en barrios y colonias, así como en tianguis y mercados en donde difícilmente se puede tener sana distancia, “pero a nosotros sí nos amenazan con cerrarnos, quitarnos las licencias o multarnos, pero no es parejo para todos”, concluyó.