Después de que el presidente anunciara que la empresa Gas Bienestar enfocada en comercializar gas LP a menor costo estará lista en tres meses, expertos aseguraron que Petróleos Mexicanos (Pemex) no tiene la capacidad operativa y administrativa para lograrlo en tan poco tiempo, además de que consideraron que será complicado que la empresa pueda tener eficiencia en operación y distribución.
En contra
La presidenta de la consultora Grupo Ciita, Beatriz Marcelino, explicó que Pemex no tiene capacidad operativa y administrativa para emprender una tarea de esta relevancia, considerando que el gas LP es utilizado por más de 90 millones de mexicanos.
Además, dijo, se debe considerar la capacitación que necesitará la gente para operar una empresa como ésta, aunado a que Pemex no podrá controlar el precio del gas LP porque esto depende de muchos factores, pero el más importante es el precio de referencia de Mont Belvieu.
"Para bajar el costo del gas LP tendría que ser subsidiado, porque todos los gastos operativos y administrativos elevan los costos. Con los números rojos que tiene la paraestatal, y metiéndose a un mercado donde no tiene la experiencia será más complicada la situación", señaló en entrevista con MILENIO.
Beatriz Marcelino dijo que restando los gastos operativos y administrativos de las empresas distribuidoras, la venta de gas LP deja un margen de utilidad de entre 1.20 pesos y 50 centavos por litro, dependiendo de la región.
En esto coincidió el especialista del sector energético, Arturo Carranza, quien recordó que antes de la apertura del mercado Pemex le vendía a los distribuidores lo que producía o importaba, por lo que ya tenía experiencia en algunos segmentos de la cadena, sin embargo siempre dejó la distribución a empresas privadas.
En entrevista apuntó que la distribución y la venta final son actividades que no dejan muchas utilidades o márgenes de rentabilidad, y que para maximizarlas se necesitan operaciones eficientes, y para una empresa del tamaño de Pemex es complicado que pueda tener esa eficiencia en distribución y operación.
"El gobierno va a tener que incrementar el presupuesto público para Pemex, con el fin de que pueda estar operando en tres meses, pero el Presidente dijo que las finanzas públicas están fuertes, y por eso este apoyo. Estará operando pero no tengo la certeza de que lo haga con eficiencia. Estas inversiones se hacen a costa de otros proyectos, tendrá un impacto en las finanzas públicas".
A favor
Por su parte el especialista de la Universidad La Salle, Carlos Jiménez, refirió que el tiempo establecido por el presidente es ambicioso, pero es posible, ya que el gobierno tiene la capacidad para echar andar la empresa en tres meses y consideró adecuado en estos momentos de recuperación post pandemia poder tener un aliciente en el mercado de trabajo.
"Ya se tienen los centros de distribución que podrán estar a cargo de esta empresa y las condiciones están dadas para que se haga un proyecto en el tiempo que lo planteó el presidente. Tendremos que seguir la propuesta en términos de la estructura de costos, y ser cuidadosos en la parte de los subsidios, porque las empresas privadas podrían argumentar competencia desleal y serían trabas legales".
Sin embargo, explicó Jiménez, el punto débil de la propuesta es que el presupuesto federal no está en condiciones de ejercer ciertos subsidios a la comercialización y la viabilidad financiera de la empresa está en riesgo.
Dijo que si bien existe la posibilidad muy amplia de bajar los precios, se debe hacer dentro de las reglas del mercado.
"Siempre y cuando lo haga con las mismas reglas que lo hacen las demás empresas, me parece una muy acertada medida para el mercado. Tendrá que ser extremadamente productiva para que lo haga, porque nos enfrentamos a precios internacionales, producimos pocos energéticos, perdimos mucha capacidad de producción".
Control de precios
Sobre la posibilidad de que el gobierno federal pueda controlar los precios dijo que es más riesgoso, porque mientras que la producción nacional sea baja y la dependencia sea con respecto a precios internacionales, la fijación de precios no puede ser una medida viable en términos de libertad de mercado, porque se estrangularía a las empresas.
"Definitivamente fijar precios no es una opción adecuada, la opción más viable en términos económicos debiera ser la búsqueda de la productividad y el aumento de la producción nacional".
Beatriz Marcelino explicó que los privados importan de un 35 a un 40 por ciento de toda la demanda de gas LP nacional, Pemex produce entre un 13 y 16 por ciento y el resto lo importa. La mayoría de las importaciones de los privados provienen de Estados Unidos y de Canadá, principalmente por buquetanques y en el caso de Pemex por oleoductos.
lvm