El economista en jefe del Instituto Internacional de Finanzas (IIF), Robin Brooks, aseguró que las divisas de las economías emergentes tienen una subvaluación de 5 por ciento, mientras que el peso mexicano se encuentra en un valor razonable frente al dólar. No obstante, advirtió que el gran desafío es evitar que las monedas de estos países se fortalezcan demasiado, a fin de generar un retorno de largo plazo para el crecimiento.
Durante su participación en el podcast de Grupo Financiero Banorte, el economista explicó que, el que el tipo de cambio se mantenga cerca de los 20 pesos por dólar es razonable, toda vez que la depreciación generará que aumente la inflación, por lo que, dijo es necesario que las políticas contemplen tomar medidas para evitar cualquier apreciación significativa.
“La preocupación más grande estos días es que la depreciación hará que aumente la inflación. No creo que sea una preocupación válida por ahora. Todavía tenemos una enorme brecha de producción. No es un entorno muy inflacionario. Entonces, tenemos un valor razonable de dólar MXN cerca de 20. Creo que eso quiere decir que realmente hay que mantener el tipo de cambio en ese punto”, dijo.
Durante la conversación con Alejandro Padilla y Gabriel Casillas, quienes dirigen el grupo de análisis de Banorte, Brooks señaló que existen dos mercados que están saliendo del “shock” provocado por la pandemia: México y Turquía. Sin embargo, aseguró que México tiene la “enorme” ventaja geográfica de que tiene frontera con Estados Unidos y puede aprovechar la oleada de estímulos y la alta demanda doméstica del país vecino, lo que ayudará a las exportaciones mexicanas.
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“Si vemos las cuentas nacionales, los volúmenes de las exportaciones, bienes y servicios habían aumentado más que cualquier otro mercado emergente. El único otro mercado emergente a quien le fue igual de bien fue a Turquía. Así que crucemos los dedos para que las condiciones para México sean buenas para que se beneficie del panorama de estímulos de EUA”.
Asimismo, Brooks anticipó que la economía estadunidense tendrá una recuperación vigorosa este año, con el avance de los programas de vacunación y un estímulo fiscal adicional por 1.9 billones de dólares. El FMI revisó al alza su expectativa de crecimiento del PIB, de 3.1 a 5.1 por ciento, mientras que el IIF pronostica hasta 6.5 por ciento promedio anual.
Señaló que actualmente la economía de Estados Unidos no está en un escenario de inflación extremadamente baja, a diferencia de otros países, ya que en diciembre de 2020 el indicador PCE (por sus siglas en inglés) se encontraba cerca de 2 por ciento, si se consideran los efectos del mercado cambiario y el precio del petróleo.
Aun así, el país tiene las condiciones para subir la inflación, por lo que el debate se enfoca en la transición hacia el reflation trade –un término que alude a la "teoría de reflación" del economista Irving Fisher–, el cual se centra en la expectativa de una expansión económica acompañada de presiones inflacionarias, producto de una política fiscal y monetaria expansiva.
AMP