El petróleo subía más de 3 por ciento, mientras el dólar se debilitaba, la amenaza de una prohibición de la Unión Europea al crudo ruso se aproximaba y los inversores veían perspectivas de una relajación de las restricciones chinas por covid-19.
Si bien los temores a una recesión mundial limitaban las ganancias, los futuros del crudo Brent subían 3.29 dólares, o 3.48 por ciento, a 97.96 dólares el barril, lo que supone una ganancia semanal de más del 2 por ciento.
Los futuros del crudo estadunidense West Texas Intermediate (WTI) subían 3.52 dólares, o 3.99 por ciento, a 91.69 dólares y se encaminaban a una ganancia semanal de más del 4 por ciento.
Ambos contratos se vieron favorecidos por la debilidad del dólar, que puede impulsar la demanda de petróleo porque hace que la materia prima sea más barata para quienes tienen otras divisas.
Aunque la preocupación por la demanda pesó en el mercado, se espera que la oferta siga siendo escasa debido a los embargos previstos por Europa sobre el petróleo ruso y a la caída de las reservas de crudo en Estados Unidos.
"La ligera debilidad del dólar y la próxima prohibición de las ventas de petróleo ruso son ciertamente un apoyo, ya que la atención se está desplazando de los temores de recesión a los problemas de suministro", dijo el analista de PVM Oil Associates, Tamas Varga.
"El principal catalizador, sin embargo, son los informes de que China podría suavizar sus restricciones de cero covid, lo que supondría un impulso para su economía y para la demanda por petróleo".
La prohibición de la UE a las importaciones de crudo ruso entrará en vigor a partir del 5 de diciembre. Todavía se están debatiendo los detalles del límite de precios del G7 destinado a aliviar las restricciones a los flujos rusos fuera de la UE.
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