El sector de la arquitectura en el estado de Puebla enfrenta uno de los momentos más complicados en este año ya que se encuentra detenido y los insumos registraron aumentos de más de 40 por ciento.
De acuerdo con el análisis de Octavio Flores Hidalgo, investigador de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), el sector está registrando procesos inflacionarios.
“Se aumentó 40 por ciento todos los insumos y los procesos. Así de fácil. Estamos en recesión, sí. Económicamente, no hay una dinámica sana en los procesos de construcción. Se han atrasado los procesos de licitación y el manejo de los recursos. Es obvio que hay procesos inflacionarios que se buscan contener y controlar, pero sí estamos hablando de que se han incrementado del 20 al 40 por ciento”, apuntó.
Al comparar los costos actuales con los que se presentaban hace 10 años, se detecta que los recursos que se destinaban para construir tres casas ahora solo alcanzan para el desarrollo de una, situación que demuestra las complicaciones que se presentan, apuntó el especialista.
El investigador de la Facultad de Arquitectura de la universidad poblana de carácter privado alertó que ante los aumentos que se registran en el sector, crece la posibilidad de que las familias decidan desarrollar sus viviendas sin la supervisión de un arquitecto, lo cual, se traduce en riesgos ya que en cualquier momento se puede presentar un sismo que termine con el patrimonio edificado.
“Han cambiado mucho los costos. Cada vez es más difícil de acceder y eso se traduce en acciones que pueden ser de cuidado como la autoconstrucción no asistida, no supervisada, no asesorada. Todo esto se traducirá en que se puedan presentar derrumbes ante sismos y la pérdida de un patrimonio que nos cuesta mucho poder alcanzarlo. Con los aumentos, la población busca ahorrarse algunos costos y eso puede repercutir en la calidad de las obras”, explicó.
La pandemia de la covid-19 se traduce en un antes y un después en la arquitectura, de tal manera, que la población se dio cuenta que se pueden mejorar espacios para convivir con sus seres queridos y para desarrollarse personalmente, añadió el académico.
“No nos ha caído el veinte de lo que la pandemia impactó. Aunque muchos estuvimos aislados, lo queremos negar. Tan es así que ahora estamos tratando de vivir como antes de la pandemia en cuestiones de manejo de espacios. En la pandemia vimos todos los problemas que hay en las casas. Antes de la pandemia, la casa solo era un espacio para ir a dormir, pero durante el confinamiento, nos dimos cuenta de los problemas de mantenimiento”, resaltó.
Flores Hidalgo destacó que durante la pandemia se registró un aumento de 30 por ciento en la venta de pinturas e impermeabilizantes luego de que las familias se dieron cuenta de la importancia de mejorar los espacios en los que vive.
“En medio de la pandemia, incrementó hasta 30 por ciento la compra de pinturas e impermeabilizantes. La gente iba a comprar insumos para arreglar, para mejor la imagen. Cuando estamos en una dinámica de estrés, no nos deteníamos a observar lo que pasaba en casa y en diferentes calles de la ciudad”, expresó.
CHM