Los fenómenos naturales y las eventualidades pueden afectar de forma grave a negocios, tanto pequeños como grandes, por lo que la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) remarcó la importancia de mantener los comercios asegurados.
Datos a 2020 de la asociación destacaron que en el país menos del 20 por ciento de comercios del país contaban con algún tipo de seguro.
En un comunicado, resaltó que las ocasionadas por los factores ya mencionados pueden resultar en pérdidas económicas que con el tiempo podrán recuperar, sin embargo, para otras puede representar la quiebra si no cuentan con un seguro que los respalde.
La asociación destacó que el tener una cobertura de seguro en un negocio es fundamental para que la inversión de este esté protegida, ya que este instrumento puede cubrir imprevistos causados accidentalmente, o riesgos puntuales como incendios o robos.
“Además, un seguro no solo cubre los daños materiales, sino que también asegura la continuidad de las operaciones en caso de un siniestro, si un negocio debe cerrar temporalmente debido a un desastre, existen coberturas que puede cubrir las utilidades y los gastos que siguen teniendo posterior al siniestro, permitiendo que el negocio se recupere y vuelva a funcionar sin mayores complicaciones”, apuntó la AMIS.
Destacó que la indemnización que ofrece un seguro es crucial para que un negocio pueda recuperar la continuidad de sus operaciones de manera oportuna y más en México donde se tienen niveles bajos de aseguranza en este rubro.
“Al recibir el valor de la suma asegurada, el negocio puede cubrir rápidamente los costos de reparación, reponer inventarios, o incluso rentar un nuevo local si es necesario. Esto evita que se prolongue el cierre del negocio”, añadió la asociación.
La AMIS destacó que si ya se cuenta con un seguro es importante observar las coberturas del seguro a fin de obtener mayores beneficios, como:
- Gastos extraordinarios: costos de reparación, reubicación o adquisición de equipos, renta en un espacio diferente por la ocurrencia del siniestro o cualquier gasto de emergencia.
- Pérdida de ingresos: indemnización por la pérdida que tenga el asegurado derivado de la disminución de sus ventas durante el período de interrupción.
- Gastos fijos: pago de salarios, rentas, servicios públicos y otros gastos operativos.
- Utilidades pérdidas: compensación por las ganancias que hubieran obtenido si tu negocio hubiera operado con normalidad.
Por último, la asociación mencionó tres preguntas clave que se debe realizar al momento de asegurar algún negocio, como tener bien delimitado cuál es el bien que se planea asegurar y su cobertura.
Otra pregunta relevante para la organización es identificar los riesgos específicos que podrían afectar el patrimonio de un negocio es clave para elegir el seguro y por último el delimitar el monto adecuado de la aseguranza.
MRA