Por: Carlos Brown Solà
Ilustración: Ricardo Figueroa, cortesía de Nexos
44 de cada 100 pesos que ejerce el Metro en un año provienen de la Federación y otros 47 son de ingresos propios del STC Metro –donde 22 de cada 100 pesos provienen del Fimetro–. Esto dejaría apenas 5 pesos que provienen de los recursos fiscales que pone la Ciudad de México y menos de 3 de cada 100 pesos son por financiamiento con deuda. Lo anterior ilustra la alta dependencia de los recursos transferidos por la Federación para la operación del Metro de la Ciudad de México, lo que lo hace vulnerable a modificaciones en el arreglo fiscal federal o a reducciones en las asignaciones por parte de la Federación. Debido a la imposibilidad de etiquetar ingresos fiscales específicos para el sistema debido a la actual configuración de nuestro sistema fiscal, esta vulnerabilidad se ve acentuada por la variabilidad de los ingresos propios, como ocurrió durante la etapa más crítica de la pandemia de covid-19.