Alberto Isaac Mendoza Torres
  • Yo soy mi prioridad

    Como en una epifanía, en un despertar de la conciencia espiritual, las personas descubren que es cierto, que el origen de todos sus males, es que han dedicado la vida entera a complacer a los otros
  • ¿A dónde con tanta prisa?

    No puedo quitarme de la cabeza la idea de que muchas personas asocian el saber manejar con ir a altas velocidades, rebasar, acelerar y frenar de golpe
  • Nadar entre antipsicóticos

    ¿De donde viene tanto medicamento controlado? Claro que los psiquiatras no renuncian a su facultad de recetarlo
  • Apuntes sobre el temor infantil

    Ya no se llama Roberto. Pero solo él lo sabe. Sabe que ya no sabe nada. Nada de lo que ha conocido o le han dicho que existe ahora tiene sentido para él.
  • ¿Quién es tu padre?

    Para que el trabajo psicoanalítico pueda tejerse y destejerse es necesario que el analizante pueda contar su propio mito tal y como lo escuchó
  • ¿De qué te sirve llorar?

    Ella invariablemente les respondía: “si de algo sirviera llorar, lloraría contigo”.
  • La madre siempre tiene la razón

    El autor de esta publicación se mostraba sorprendido de que los pequeños estuvieran tan cándidos montados en una obra de Leonora Carrington.
  • Se escribe romantizar, pero se lee moralizar

    Se dice que la clínica psicoanalítica es la clínica del amor. Que lo que cura -en el sentido en el que lo entiende el psicoanálisis- es el amor.
  • Aplazar la ida a terapia

    Me parece que quien es capaz de sostener este tipo de argumentos quizá en realidad no necesite una ayuda psicológica.