'La casa de los famosos México'

Ciudad de México /

Ya llegó a Las Estrellas, Canal 5 y VIX, “La casa de los famosos”, una de las maldiciones más grandes que existen en la industria de la televisión a nivel mundial.

Admirable la estética de este nuevo show. ESPECIAL

¿Por qué? Porque como viene de fuera con todo el ímpetu de una corporación particularmente poderosa, no hay manera de no importarlo.

Si alguien se atreviera a decirle que no a los responsables de este formato, Endemol no sólo se iría a otra televisora con condiciones inmejorables, castigaría a ese cliente complicándole la vida con los contratos abiertos y negándole otros contenidos.

Ahí sí habría serios problemas. Por eso, este producto derivado de “Big Brother” o se hace, o se hace.

Lo mismo pasa con las versiones latinas de mil y un éxitos estadounidenses tipo “La niñera”, “Breaking Bad” o “Casados con hijos”.

Nadie es tonto en esta industria. Todo el mundo sabe y reconoce que no hay manera de competir contra el recuerdo de los programas originales, pero se tienen que hacer por razones que el público ni se imagina.

Así que al mal tiempo, buena cara. ¿Qué es “La casa de los famosos México”? “Big Brother VIP México”, pero con otro título y cambiándole el nombre a ciertos elementos. Aquí, por ejemplo, el señor que todo lo ve (y a quien nunca le vemos la cara) no se llama Big Brother. Es mujer y le dicen La Jefa.

¿Cuáles son las notas? Las audiencias y los retos a nivel televisión.

Hablemos de las audiencias. Es muy importante el lanzamiento de “La casa de los famosos” porque, más que seducir a las nuevas generaciones, va por las personas que fueron niñas a principios de los años 2000.

Ellas y ellos, hoy, son jóvenes adultos. Ellas y ellos, hoy, no sienten tanta nostalgia ni por las series ni por las telenovelas. Sienten nostalgia por lo que se hizo con entusiasmo en aquellos tiempos: los “reality shows”.

¿Sabe usted la importancia que tiene la nostalgia en términos emocionales justo ahora que la humanidad entera está sumergida en la peor de las incertidumbres?

Si no me cree, voltee a ver a Disney con “La sirenita”.

Por si esto no fuera suficiente, esa generación que creció amando ese tipo de televisión, que es la misma que da la vida por “Rebelde”, “Malcolm el de en medio” y otros títulos similares, es la última generación que se hizo viendo televisión, sólo televisión.

A las generaciones que vienen después ya les tocaron los videojuegos como un todo, el “streaming” como una posibilidad y algo todavía más poderoso: las redes sociales.

Dicho en otras palabras: ahora es cuando se debe regresar a “Big Brother”. Después podría ser demasiado tarde.

Las razones para afirmar esto son muy simples: cuando se hizo “Big Brother” por primera vez en México, existía la privacidad, el exhibicionismo era algo malo, ver gente desnuda a escondidas sonaba atrevido y asuntos como la diversidad sexual eran temas tabú.

Por eso esto ya no se llama “reality show”. Se llama juego. Por eso ya ni caso tiene que encierren a desconocidos. Para ver gente común y corriente haciendo el ridículo, moviendo las nalgas o participando en dinámicas absurdas tenemos TikTok, Onlyfans y mil herramientas más.

A esto me refiero cuando hablo de retos a nivel televisión. “Big Brother” era un negociazo sólo con lo que recibía por aquellas legendarias llamadas telefónicas que le cobraban al público cada vez que marcaba a cierto número para apoyar a su participante favorito.

Eso ya no existe, pero generar este título eso es igual de caro por la monumentalidad de la producción y por todos los lugares por donde se tiene que distribuir para que la gente “espíe” a los famosos como las galas, las transmisiones diarias y las cámaras exclusivas que están en la plataforma VIX.

Aquí es donde hay que hacerle un reconocimiento público a Kiren Miret, la mujer que hoy tiene que hacer diez veces más de lo que hizo Pedro Torres en “Big Brother” para obtener algo parecido a lo que él consiguió.

Me parece admirable toda la estética que hay en “La casa de los famosos México” que no hubo (ni habrá) en “La casa de los famosos” de Estados Unidos.

Pero me parece más admirable aún, la selección de ese reparto que dice más cosas de las que normalmente se dicen cuando se hace este tipo de televisión, y algo que casi no se menciona: la transformación física del edificio de Televisa San Ángel.

Cuando paso frente a esas instalaciones, me siento en Nueva York.

No puedo creer que un edificio tan sagrado se haya remodelado para que la gente, cuando pasa por enfrente en sus vehículos, vea y sea visto por uno de los “sets” de esta emisión.

Eso es pensar en grande. No tonterías. Y ni hablemos de los conductores porque no existen mejores rostros, en toda TelevisaUnivision, para manejar esto. ¿O usted qué opina?

Luche por ver “La casa de los famosos México” en cualquiera de sus manifestaciones. Es una de las maldiciones más grandes que existen en la industria de la televisión, un ejercicio de nostalgia, un reto. ¿A poco no?


  • Álvaro Cueva
  • alvaromilenio5@gmail.com
  • Es el crítico de televisión más respetado de México. Habita en el multiverso de la comunicación donde escribe, conduce, entrevista, da clases y conferencias desde 1987. publica de lunes a viernes su columna El pozo de los deseos reprimidos.
Más opiniones
MÁS DEL AUTOR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.