De lo que resulte de la invasión rusa a Ucrania depende la economía mundial en los próximos meses, tal vez años. Y sí, aunque a veces pensemos que estamos muy lejos para que nos impacte, la verdad es que en una economía globalizada como la que vive el mundo, los efectos pueden ser grandes y en todas partes.
Por otra parte, los tiempos de redes sociales e información inmediata nos han traído escenas terribles de la crueldad de la invasión en territorio ucraniano. Pero… ¿y si Ucrania va ganando?
El profesor Eliot A. Cohen, distinguido internacionalista, ex consejero del Departamento de Estado hace más de una década y autor de un libro sobre la fuerza militar, hace ese argumento, insiste, más allá del horror propio de una guerra, en un artículo recientemente público en The Atlantic.
Algunas líneas: “La evidencia de que Ucrania está ganando esta guerra es abundante, solo se tienen que observar de cerca los datos disponibles. La ausencia de progreso ruso en las líneas del frente es solo la mitad de la imagen, aunque está oscurecida por mapas que muestran grandes manchas rojas que reflejan no lo que los rusos controlan, sino las áreas a través de las cuales han pasado. El fracaso de casi todos los ataques aéreos de Rusia, su incapacidad para destruir la fuerza aérea ucraniana y el sistema de defensa aérea, y la parálisis de semanas de la columna de suministro 40 millas al norte de Kiev, son sugerentes. Las pérdidas rusas son asombrosas: entre 7 mil y 14 mil soldados muertos, dependiendo de la fuente, lo que implica (utilizando una regla general de rango bajo sobre las proporciones de tales cosas) un mínimo de casi 30 mil sacados del campo de batalla por heridas, captura o desaparición…
“Agregue a esto el repetido error táctico visible en los videos incluso para los aficionados: vehículos agrupados en las carreteras, sin infantería cubriendo los flancos, sin fuego de artillería estrechamente coordinado, sin apoyo aéreo de helicópteros y reacciones de pánico a las emboscadas. El ejército ruso ha comprometido más de la mitad de sus fuerzas de combate a la lucha. Detrás de esas fuerzas hay muy poco. Las reservas rusas no tienen entrenamiento del cual hablar y Putin ha prometido que la próxima ola de reclutas no será enviada, aunque es poco probable que cumpla con esa promesa”.
Cohen afirma que esto no evita que Putin, en su obsesión, desate otros conflictos… o armas, pero, por lo pronto, dice, Ucrania va ganando.
Carlos Puig
@puigcarlos