En el congreso mexiquense, el Demócrata elogió a Alfredo del Mazo Maza por no haber intervenido a favor de la candidata de su partido en la reciente elección para la gubernatura del Estado de México. Acusó, por enésima vez, haber sido víctima de fraude en los comicios presidenciales de 2006 y 2012 y reconoció la actitud de Enrique Peña Nieto quien, al mantenerse al margen durante el proceso electoral de 2018, no obstaculizó su inobjetable triunfo. Por eso dijo agradecido: “El presidente Peña, a diferencia de los otros dos presidentes, lo digo con todo respeto, no se metió, es decir, no aceptó hacer trampas y aceptó la voluntad del pueblo de México, eso no lo voy a olvidar”.Desde su exilio dorado en Madrid, el ex mandatario debió escuchar conmovido y feliz las palabras del poderoso garante de su impunidad y riqueza.
¿Podría decir lo mismo Xóchitl Gálvez del Demócrata en estos días de tormenta?¿Podría agradecer su respeto y el de los suyos, cuando la rabiosa jauría de la 4T, sus gobernantes, políticos, caricaturistas, articulistas, medios, la tienen en la mira, atizando, con medias verdades o descaradas mentiras, “la hoguera de la cambiante, la caprichosa opinión pública”, como diría Juan Gabriel Vázquez, preparando desde ahora el cochambroso perol de una elección de Estado en 2024, como ha reiterado Héctor Aguilar Camín?
En prolongada la noche mexicana, mientras se alista para escuchar el penúltimo Grito del Demócrata desde el balcón central de Palacio Nacional, el cartujo tiembla de pies a cabeza al recordar la espeluznante sospecha de Enrique Serna en MILENIO: “La entrega del bastón de mando a Sheinbaum y el omnipresente fotomontaje de AMLO apuntándola con el dedo proclaman sin rubor que se ha restaurado la monarquía sexenal hereditaria. Las amenazas de suprimir la autonomía del INE y controlar desde el Ejecutivo a la Suprema Corte de Justicia ejemplifican muy claramente la vocación autoritaria del nuevo partido hegemónico. Si en las elecciones del 24, Morena consigue la mayoría calificada en las cámaras, la nueva dictadura llegaría para quedarse”. Dios nos ampare.
Queridos cinco lectores, El Santo Oficio los colma de bendiciones. El Señor esté con ustedes. Amén.