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¿Estamos totalmente amparados por el T-MEC?

Ciudad de México /

La respuesta es no. Ante la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles recíprocos —o como él las llama, tarifas— a todos los países con los que comercializa EU a partir del 2 de abril, México no está totalmente a salvo por lo siguiente: del total de exportaciones a nuestro vecino, que suman algo más de 500 mil millones de dólares, no todas cumplen con las reglas de origen, uno de los requisitos más importantes del T-MEC.

Se calcula que entre 35 y 40% está en esta situación, y la razón es que ante los bajos aranceles que tiene EU (alrededor de 2%) para muchos productos mexicanos, algunos productores prefirieron irse por la libre y no cumplir con las reglas de origen.

Sin embargo, los artículos que importamos de EU a México tienen un gravamen de 6%, con lo cual si nos netean estos, tendríamos que pagar un impuesto de 4% por 40% de nuestras exportaciones. En un ejemplo no exacto: si exportamos 500 mil millones de dólares y 40% no cumple las reglas, serán 200 mil millones de exportaciones las que estarían gravadas con 4%, o sea, el importe será de 8 mil millones de dólares, pero esto es muy simplón, porque el arancel que nos pueden recetar es cuando menos de 6%.

Lo importante es que este impuesto no es un drama para México, claro, siempre y cuando las cifras estén correctas; de cualquier forma, sería mejor que no nos pusieran nada. Si nos asignan estos aranceles, los productores mexicanos podrían enmendar la plana y hacer lo necesario para cumplir con las reglas de origen, y así el arancel recíproco desaparecería.

Lo anterior lo comento porque cuando veo los resultados de la Bolsa en México y el tipo de cambio, siento que los mercados piensan que vamos a cruzar el 2 de abril con la noticia de que no habrá aranceles a las exportaciones mexicanas, salvo por los del aluminio y el acero.

Si logramos salvarnos de los aranceles, el dólar puede descender hasta 19.50; y si las tasas que nos apliquen son moderadas, el dólar regresará a 20.50, esto en un horizonte de uno a tres meses. En una visión de mayor plazo, la moneda mexicana estará presionada porque la economía no está fuerte, la previsión de crecimiento es muy baja y las tasas de interés locales habrán caído a niveles de 8 u 8.5%. Espero que nuestro gobierno mantenga la voluntad para reducir el altísimo déficit fiscal que dejó López Obrador.

Me mantengo optimista, pues considero que Sheinbaum ha cumplido con los acuerdos a los que llegó con Trump. Los avances en seguridad son notables, la lucha contra el narco ha dado muy buenos resultados, queda pendiente el tema de los políticos que han sido infiltrados en las redes criminales.

Los esfuerzos para contener la migración de indocumentados han dado buenos resultados. En relación al fentanilo, los decomisos han sido abundantes, pero aquí falta que el gobierno de EU haga lo propio para eliminar las bandas que distribuyen la droga, hacer verdaderos esfuerzos educacionales y de cualquier otra índole para reducir el consumo. Por ello me mantengo optimista ante el anuncio del 2 de abril.


  • Manuel Somoza
  • Presidente de CI Estrategias por Somoza Musi. Ejecutivo con más de cuatro décadas de experiencia en el sector financiero. Es economista de la Universidad Anáhuac y tiene una maestría en Finanzas del Tec de Monterrey.
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