El gobierno de México necesita un personaje al frente del deporte que ponga a los pobladores del país a ejercitarse físicamente. Esto redundará en un mejor estado de la salud de todos y en mejores niveles de bienestar personal en muchos otros ámbitos.
Ese el primer objetivo de la Conade (Comisión Nacional de Cultura Física y
Deporte), que depende de la Secretaría de Educación Pública. No es, contrario a lo que se piensa, su prioridad el deporte de alto rendimiento y los resultados que obtengan los atletas inscritos en esta categoría en las distintas competencias internacionales a las que acuden.
¿Cómo? ¿A partir de qué indicadores se puede y debe medir si quien ejerza la responsabilidad de dirigir la Conade cumplió o está cumpliendo con su labor o no?
Nadie sabe. Ha transcurrido prácticamente todo el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, con Ana Gabriela Guevara al frente de la Conade, sin que se informe al respecto.
¿En tiempos de la 4T la población del país practica más o menos deporte que en sexenios anteriores? Se han construido muchas instalaciones deportivas,
increíbles parques y zonas de recreo, eso me queda claro. Pero nadie puede decir que desde la Conade se haya ejecutado un plan consistente y efectivo para que la gente salga a hacer deporte.
Lo más que vemos en anuncios en impresos o en spots televisivos es al Instituto Mexicano del Seguro Social, tan bien dirigido por Zoé Robledo, informando e invitando a las personas a que se activen físicamente, al mismo tiempo a que cuiden su alimentación, en beneficio de su salud.
Lo que no ha hecho Ana Gabriela Guevara desde su responsabilidad (en
conjunto con los Institutos del Deporte de cada entidad federativa), por desgracia tampoco lo hicieron otras administraciones federales.
Habitualmente todos los Presidentes de la República recurren a ex deportistas reconocidos y destacados para entregarles la Conade. Y ya, parece que con esta simple designación todo lo demás sobra.
Espero que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, tome la decisión que le corresponde privilegiando la primera función y deber de la Conade: poner a todas y todos los mexicanos a hacer deporte y mantenernos sanos.