Una menor de identidad reservada fue víctima de abuso sexual entre julio y diciembre del 2022 dentro del centro de formación olímpica Iridia Salazar Blanco por parte de Gustavo "N", quién era padre de otra alumna de la institución y amiga de la afectada.
En entrevista para MILENIO, la madre contó que aunque desde un inicio la menor se dio cuenta de que lo ocurrido era un abuso, ella optó por no decirle, pues al contarle al director del centro Arturo Blanco, éste le pidió no decir nada y que él hablaría con el señor para detener los abusos, sin embargo, esto no ocurrió.
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"El maestro le dijo que no, que no dijera nada, que él iba a hablar con el señor para que no la molestara, lo que pues nunca sucedió; yo le pregunté al maestro de Tae Kwon Do y me dijo que mi hija nunca le había comentado nada, que era mentira y la niña me había dicho que sí, pero que no me dijera nada porque yo iba a reaccionar muy mal y que el señor me podía hacer algo", precisó.
Por lo cual, ante la falta de acción del profesor, en enero de este año la menor decidió comentarle a su madre, quién interpuso una denuncia en la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, que a pesar de los peritajes psicológicos determinaron que la menor había sido víctima de abuso sexual, eso no ha sido suficiente para el caso.
De acuerdo con la madre, durante las audiencias realizadas en el reclusorio Oriente, la jueza le solicitó a la menor nombrar las fechas exactas y la mano con la cual habían ocurrido estos abusos, esto ya que se necesitaban todos los elementos necesarios para poder vincular a proceso al presunto abusador.
"Prácticamente lo que le dijeron es que como se acordaba con que mano la había tocado estaba mintiendo, y que pues como estaba en juego la libertad de una persona, pues una niña de 11 años se tenía que acordar exactamente de lo que había pasado con memoria fotográfica porque sino, no iba a proceder", lamentó la madre de la menor.
Ante esto, la familia de la menor busca interponer un recurso ante la Fiscalía para reabrir el caso, ya que ante la falta de una correcta defensa la madre de la menor no pudo apelar la resolución de la jueza, por lo cual se deberán comenzar de nuevo las investigaciones para que el presunto abusador pueda ser vinculado a proceso.
"Yo tengo muchísima impotencia, mucho coraje que le den más prioridad a una persona, a un acosador, que porque es la libertad de una personas ¿y dónde quedan los derechos de mi hija? ella es una niña y el señor actuó con toda la alevosía y ventaja", precisó la madre de la menor.
RM