Ángel es una de las víctimas mortales de los ataques armados ocurridos en Reynosa durante el fin de semana. Era un joven que apenas se había graduado en Enfermería y su sueño era convertirse en doctor, pero ya no lo pudo lograr, pues perdió la vida el pasado sábado y su cuerpo fue velado este lunes en la ciudad fronteriza de Tamaulipas.
El sábado, el Grupo de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz en Tamaulipas confirmó que sujetos que iban a bordo de varios vehículos hicieron disparos en diversas colonias de Reynosa, lo que provocó la muerte y lesiones a varias personas.
Hasta el último reporte, van 19 personas muertas incluyendo a cinco pistoleros abatidos por policías estatales.
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Una de las víctimas es Ángel Fernando Ruiz, quien tenía 19 años de edad y era trabajador de una cuadrilla de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa) de Reynosa.
La hermana de Ángel comenta que él fue asesinado en el ataque armado de la colonia Almaguer este sábado.
El joven se acababa de graduar como licenciado en Enfermería y reunía recursos con su trabajo para estudiar Medicina y convertirse en doctor.
La familia de la víctima señala que ni la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas, el gobernador o los alcaldes de Reynosa o Rio Bravo han tenido acercamiento alguno para brindar apoyo.
“Nosotros esperábamos que la alcalde o alguien se comunicara con nosotros pero no hasta ahora nadie… Pedimos justicia, estrategias para que esto no vuelva a suceder”.
Este lunes les fue entregado el cuerpo de Ángel, el cual se encuentra en el Velatorio Río Bravo. Los familiares solicitaron a la comunidad que pueda apoyarlos con agua o refrigerios para el velorio que con esfuerzo solventaron.
"No fueron balas perdidas"
Testimonios de familiares de víctimas y sobrevivientes coinciden en señalar que los inocentes no murieron por balas perdidas o daños colaterales de un enfrentamiento, sino un ataque directo contra la comunidad reynosense, calificada incluso por los afectados como terrorismo.
“No fue enfrentamiento, ellos fueron salvajes, no nada más con mi hermano, mi hermano tenía cinco tiros… Balas perdidas no fueron, no es cierto… Dios tenga misericordia de esa gente, toda esta calle de la Almaguer fueron muchos muertos no fue uno ni dos, fueron alrededor de diez muertos, solo en una calle… ¿Las autoridades que están haciendo?”, señaló la señora San Juanita Recio, hermana Alfredo Recio, taxista de 56 años ejecutado y quien fue velado en su casa.
EAS