La Feria Regional de Guadalupe 2023 se convirtió en escenario de una agresión armada cuando un comando delictivo atacó a comerciantes de esta celebración patronal, que fue instalada en el jardín Juárez del municipio de Guadalupe, vecino a la capital de Zacatecas.
Testigos de la agresión registrada durante la madrugada, poco antes de las 03:00 horas, aseguraron que un grupo de hombres llegó hasta un puesto donde se venden cervezas y, sin mediar palabra, dispararon contra los responsables del lugar, quienes quedaron tendidos en el suelo.
Los agresores corrieron en direcciones diferentes entre la multitud. Las víctimas resultaron ser tres hombres, identificados como Alejandro España, Carlo Rogelio y Enrique Bernáldez Rayas, empresarios de la entidad en diversos ramos.
Las víctimas decidieron unir esfuerzos para colocar este año una cervecería que en redes sociales definieron como "La mejor Cantina de Feria de la Virgen 2023", según se lee en un mensaje que publicaron en redes sociales. Al lugar decidieron nombrarlo "Rey de Copas".
Tras el ataque, rescatistas que resguardaban la feria atendieron a los hombres heridos, quienes se encontraban con vida, y los trasladaron a diversos hospitales.
Dos de los empresarios baleados fueron atendidos por heridas de esquirlas; las lesiones no pusieron su vida en riesgo. La tercera víctima fue lesionada de gravedad aunque se reporta estable, indicó el empresario y político conocido como Kike Rayas.
A pesar de que se implementó un fuerte patrullaje tras la agresión armada, y que en los alrededores existe un sistema de videovigilancia de seguridad pública, hasta el momento no se tiene conocimiento de alguna persona ubicada o detenida como responsable del tiroteo.
Fuentes cercanas a las víctimas revelaron que la compra de cerveza de manera directa a las compañías distribuidoras pudo haber sido el motivo del ataque, ya que en el lugar operan grupos delictivos que monopolizan la distribución de este tipo de bebidas.
Comerciantes consultados también revelaron, bajo petición de anonimato por temor a represalias, que algunos puestos tienen que pagar derecho de piso a células criminales, además del monto que tienen que erogar por los permisos del ayuntamiento.
Por el momento, ninguna autoridad ha respondido a una solicitud de información sobre este evento de violencia que ha mermado las actividades de la celebración patronal ante el miedo de un nuevo ataque armado.
ROA