En el país se han denunciado 625 delitos por evasión de presos en los últimos cinco años, siendo Ciudad de México la entidad con más casos en dicho periodo con 79 carpetas de investigación abiertas, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Durante 2019 se abrieron 15 expedientes en Ciudad de México por evasión de presos, y casi la mitad de los casos se presentaron en los últimos tres meses del año pasado cuando se registraron siete denuncias.
En 2018 los Ministerios Públicos recibieron 20 casos, una cifra que representó un incremento importante si se compara con los 7 reportes registrados en 2017 y los 14 respectivos en 2016.
Los centros penitenciarios de Ciudad de México tuvieron en 2015 su mayor número de averiguaciones previas por dicho delito con 23 expedientes. En ese año se registraron 15 denuncias en el periodo julio-noviembre.
De acuerdo con el Código Penal de Ciudad de México señala que “Al que indebidamente ponga en libertad o favorezca la evasión de una persona que se encuentre legalmente privada de aquélla, se le impondrán de dos a siete años de prisión y de cien a trescientos días multa”.
Estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que en las cárceles administradas por el gobierno capitalino se desempeñaron 3 mil 7 vigilantes en 2018, de los cuales el 74.1 por ciento perciben un salario mensual entre 10 mil y 15 mil pesos, mientras que el resto cobra entre 5 mil y 10 mil pesos.
En lo que se refiere al nivel de estudios del personal de vigilancia, el Instituto revela que 899 custodios, equivalentes al 29.8 por ciento del total, tienen un grado de primaria y/o secundaria terminado, mientras que 699 (23.2 por ciento) concluyeron la preparatoria o carrera técnica comercial.
Por otra parte se observa que solamente 268 custodios cuentan con carreras de licenciatura, tres con nivel de maestría y otros mil 138 guardias se encuentran en la casilla de estudios no especificados.
Por año y entidad
En 2019 se denunciaron ante los ministerios públicos un total de 129 delitos por evasión de presos en el país, esta cifra fue muy similar a los 127 casos reportados en 2018, pero mayor a las 103 carpetas abiertas durante 2017.
La mayor cantidad de crímenes registrados se presentó en 2016 cuando hubo 149 investigaciones por presunta participación de guardias en el escape de reos, mientras que en 2015 se reportaron 117 casos.
Respecto a las entidades federativas, Ciudad de México, Nuevo León, Estado de México, Chihuahua y Tamaulipas concentran 45 por ciento de las 625 denuncias recibidas por este delito durante el periodo 2015-2019.
En el caso de Nuevo León se registraron 60 averiguaciones previas por la participación de custodios en fugas de reos. La mayoría de los casos se deben a los constantes fugas que se perpetraron en el penal de Topo Chico durante los pasados años, pues en septiembre pasado este reclusorio cerró sus puertas con el fin de ser demolido.
A Ciudad de México y Nuevo León le siguen en la lista el Estado de México con 59 investigaciones abiertas, Chihuahua con 52 y Tamaulipas con 36 denuncias.