Grupo Financiero Monex informó que el fraude a jubilados estadunidenses en San Miguel de Allende, Guanajuato, suma 160 millones de pesos, es decir, al menos 8 millones de dólares, cifra menor a la que se había manejado, 40 millones de dólares.
En un documento, la institución financiera señaló que hasta el momento ha recibido 49 quejas verbales y escritas de cuentas que pertenecían a dos de sus entidades financieras, Banco Monex y Monex Casa de Bolsa.
“Grupo Financiero Monex es una institución que actúa con estricto apego a la normatividad mexicana e internacional. Todas nuestras empresas y operaciones cumplen con la ley y son reguladas y supervisadas por las autoridades mexicanas correspondientes”, señaló.
La entidad financiera agregó que toda actividad irregular será denunciada y se solicitará que los responsables sean remitidos a las autoridades correspondientes.
En este sentido, Grupo Financiero Monex señaló en el documento que continúan las acciones penales, civiles y laborales contra la promotora de las cuentas, Marcela Zavala Taylor, hija del ex presidente municipal de San Miguel de Allende.
Funcionarios del banco mexicano precisaron que hasta el momento la Comisión Nacional Bancaria y de Valores está informada del caso, por lo que ya están en pláticas con los afectados para llegar a una solución.
Respecto al fraude principalmente contra jubilados estadunidenses en San Miguel de Allende, las autoridades financieras mexicanas aseguran que no pueden intervenir, ya que se trata de un representante de la filial de Estados Unidos en México la que captó la inversión, lo que significa que es el gobierno estadunidense el que debe interceder.
Mario di Costanzo, ex presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, explicó que al tratarse de un “bróker internacional”, que ofreció sus servicios en México y que no está regulado, no puede ser vigilado y supervisado ni por el organismo que dirigía ni por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.