Helicópteros, indispensables en lucha contra el 'narco'

Elementos de la Sedena han implementado un protocolo para hacer frente a las acciones de violencia que sostienen las facciones del Cártel de Sinaloa.

Sedena implementa protocolo ante enfrentamientos del Cártel de Sinaloa. | Diseño: Samantha Martínez.
y Xavier Jiménez
Ciudad de México /

Ante emboscadas, operativos prioritarios y otras situaciones de riesgo, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha establecido por protocolo solicitar el apoyo de aeronaves dispuestas específicamente para ese fin, en la denominada Fuerza en Situación de Alerta (Fusa), que se ha desplegado los últimos días en diversos puntos de Sinaloa, ante el enfrentamiento que sostienen las facciones del Cártel de Sinaloa.

A través de la Fuerza Aérea Mexicana, la Sedena dispone de 14 aeronaves para brindar respaldo aéreo en situaciones de alerta a sus soldados, ya sea para una extracción por heridas o un ataque desde el aire a fuerzas civiles hostiles, con armas Minimi con cadencia de rotor.

El propio gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, destacó la eficiencia de contar con el apoyo aéreo, en medio de la confrontación entre Los Chapitos y Los Mayos. 

Quienes disponen de la Fuerza en Situación de Alerta son los estados de Baja California, Sonora, Nuevo León, Tamaulipas , San Luis Potosí, Guanajuato, Sinaloa, Colima, Durango, Jalisco , Michoacán, Veracruz, Chiapas, Tabasco, Oaxaca y Guerrero.

La fuerza también está considerada para el traslado de objetivos prioritarios o generadores de violencia que son asegurados en regiones donde los soldados están expuestos a emboscadas.

A bordo de las aeronaves van elementos de Fuerzas Especiales o Paracaidistas del Ejército Mexicano, dependiendo de la operación. Un cuerpo de élite de la Secretaría de la Defensa bajo el mando de los comandantes de cada una de las 12 regiones militares del país, que a su vez pueden ser movilizadas a cualquiera de las entidades que dependen de la misma región.

Anteriormente, todas las aeronaves dependían de cada una de las regiones aéreas del país, que son cuatro, pero éstas debían ser coordinadas desde la Comandancia en Ciudad de México para ser desplegadas en función a sus condiciones, localización, combustible y autonomía de vuelo. De ahí la necesidad que la Fusa -capacitada para actuar en diversos escenarios- pudiera ser desplazada con mayor autonomía.

Por ejemplo, en la 4/a región militar, que comprende Nuevo León, Tamaulipas, y San Luis Potosí, se encarga de movilizar las aeronaves, y no necesariamente vuelan desde Monterrey, son ubicadas en posiciones estratégicas y pueden mantener una o dos aeronaves, con 20 o 40 elementos listos para reaccionar, explicó a MILENIO personal militar.

La fuerza de tarea que integra esta unidad son de distintas disciplinas principalmente de artillería, de la fuerza aérea, sanidad y fusileros paracaidistas.

Una de sus primeras operaciones fue la detención de Ovidio Guzmán en la comunidad de Jesús María en Culiacán, en enero de 2023.

Los helicópteros fueron empleados para un ataque aéreo al nicho donde estaba resguardado el capo.

Esa operación también incluyó la extracción de militares heridos.

Pues entonces la unidad trata de perfeccionarse en tiempos el empleo de recursos humanos y en evitar el dispendio aéreo.

Alrededor de los mil 200 elementos que componen ese tipo de unidades están constantemente certificados por la dependencia militar.



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  • Amílcar Salazar Méndez

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