Asesinan a madre e hijas en su casa en Naucalpan

Los cuerpos de Jacqueline Alva, de 20 años, y sus hijas Brenda y Sofia, de 4 y uno, fueron encontrados en una casa en la colonia San José Poza Honda. en donde estaba Pedro Rivera, padre de las menores y sospechoso del triple feminicidio.

Jacqueline Alva era madre de dos niñas./ Especial
De acuerdo con los primeros reportes, la joven y sus hijas fueron estranguladas y atacadas con un esmeril./ Verónica Díaz
Verónica Díaz
Ciudad de México /

Jacqueline Alva y Pedro Rivera vivieron juntos más de cuatro años en una casa en la colonia San José Poza Honda, en el municipio de Naucalpan, Estado de México. De esta relación nacieron Brenda y Sofia; sin embargo, las tres fueron asesinadas.

De acuerdo con vecinos, en la casa donde vivía esta familia se escucharon los gritos de Pedro diciéndole a la joven de 20 años “¡Te te voy a matar!", mientras que las niñas, de cuatro y un año de edad, lloraban.

Jacky, como era conocida, pedía ayuda pero nadie intervino; no obstante, cerca de las 14:00 horas del 9 de diciembre, los gritos y llantos dejaron de escucharse. Dentro de la casa estaban los cuerpos de las tres mujeres así como el de Pedro, quien ha sido señalado como el presunto feminicida y que posteriormente se habría suicidado.

Víctima de violencia familiar, Jacqueline decidió separarse de aquel hombreen octubre y retomar sus estudios para poder sacar adelante a sus niñas.

Pedro citó a su ex pareja para platicar toda vez que previamente él se había llevado a las menores, por lo que ella accedió verlo con la esperanza de recuperar a sus hijas y llegar a un acuerdo.

"Pedro no había superado la separación ni la negativa de Jaqueline ante una reconciliación. Pedro no pudo con su machismo, nada lo detuvo, ni sus hijas (…) La familia denunció que ya existía una denuncia contra el agresor por violencia doméstica; que de nada sirvió para prevenir esta terrible tragedia pero tampoco los gritos desgarradores fueron suficientes para que alguien las auxiliara y les salvara del horror y el dolor que vivieron en sus últimas horas", dice Sandra Soto, de la asociación Los machos nos matan en México.

De acuerdo con los primeros reportes, la joven y sus hijas fueron estranguladas y atacadas con un esmeril, en tanto que Pedro, cuenta Sandra Soto, “dejó una carta póstuma, pidiendo que los velaran y los enterraran juntos porque amaba a su familia".

Tras estos hechos, la activista exigió a las autoridades del Estado de México y a las federales esclarecimiento de los hechos que condujeron al triple feminicidio en Naucalpan.


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