La noche de este sábado se registró la caída de una barda de La vecindad del hoyo, en Toluca, Estado de México. Vecinos de la colonia 5 de mayo ya habían solicitado en enero pasado el derrumbe de estructura con valor histórico, ya que simbolizaba un riesgo, toda vez que un desprendimiento provocó la muerte de un hombre en septiembre de 2022.
De acuerdo con información del Ayuntamiento de Toluca, elementos de la Coordinación de Protección Civil y Bomberos del municipio fueron desplazados al inmueble ubicado en las calles Alexander Von Humboldt y León Guzmán.
En el lugar apreciaron que el 80 por ciento de la barda del lado de la calle León Guzmán estaba derrumbada, por lo que decidieron delimitar la región para evitar que hubiera víctimas humanas o materiales.
La autoridad municipal precisó en una tejerá informativa que habían alertado a las autoridades federales respecto del riesgo que simbolizaba a la ciudadanía esta construcción de adobe, tabique y madera.
“El inmueble en cuestión había sido notificado en reiteradas ocasiones por su condición de riesgo, y se encontraba acordonado, además, derivado de un incidente anterior, se exhortó al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) aplicar a revisión de inmuebles catalogados en el territorio municipal".
Vecinos ya habían solicitado derrumbe del inmueble
La vecindad del hoyo antiguamente fue conocida por ser un sitio de uso habitacional cerca del centro de Toluca, sin embargo, con el tiempo se fue deteriorando. El inmueble fue referente en el imaginario colectivo de la capital mexiquense por el tipo de inmueble, la edad de la construcción, entre otros.
Desde años solo estaba la fachada del inmueble, sin embargo, no había sido alterada o retirada por su condición de patrimonio histórico, no obstante, en septiembre de 2022 un hombre perdió la vida luego de que un fragmento de la estructura le cayera en la cabeza, cuando comía en un puesto ambulante de alimentos.
Derivado del accidente, vecinos de la colonia 5 de mayo habían solicitado a las autoridades municipales que exploraran la posibilidad de derribar la fachada, toda vez que simbolizaba un riesgo para los transeúntes.
Por el momento el lugar permanecerá acordonado de acuerdo con el informe municipal “para prevenir alguna afectación a peatones o vehículos que circulan en la zona”, indicó el municipio.