El cadáver de Rosabelina fue localizado el viernes pasado, semidesnudo y con una cuerda en su cuello en medio de una zona aislada de la comunidad El Madroño en Landa de Matamoros (Querétaro), tras 13 días de haber sido reportada oficialmente como desaparecida.
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Al día siguiente se reveló que el feminicidio lo cometió su acosador, quien tenía fotografías íntimas de Rosabelina de la Cruz y amenazó con publicarlas si no sostenía relaciones sexuales con él o accedía a verlo.
Incluso, robó su cuenta de Facebook y publicaba mensajes agresivos o de tipo sexual, como si fuera ella, así lo relató a MILENIO, Luisa, hermana de la víctima, quien afirma que lo único que desea es que se haga justicia.
Precisó que su familia se enteró de esta sextorsión una vez que robaron la identidad de Facebook de su hermana y también se percataron que el acosador la amenazaba con difundir imágenes de ella. Sin embargo, no presentaron ninguna denuncia.
El día que desapareció, Rosabelina salió a realizarse un tatuaje a la localidad de Jalpan de Serra, a unos minutos de su vivienda.
Al no regresar, sus familiares y amigos comenzaron a viralizar su imagen pidiendo ayuda para encontrarla y la Fiscalía de Justicia también la compartió.
El presunto agresor de Rosabelina es un hombre de 25 años de nombre Eladio “N”, alías El Yayo, y fue detenido un día después de que se localizó el cadáver. Cuando se realizó un cateo en su domicilio, encontraron el celular de la joven de 23 años y ya se encuentra vinculado a proceso.
La sextorsión es una forma de extorsión que se realiza mediante mensajes con una imagen o video de la persona chantajeada desnuda o realizando actos sexuales, que generalmente es compartida por redes sociales para que se haga viral.
En el caso del feminicidio de Rosabelina, explicó el fiscal de Justicia, Alejandro Echeverría, la víctima no presentó una denuncia formal por violencia digital, luego de que supuestamente el imputado la acosaba por redes sociales, por lo que este tema no será incluido dentro del proceso por feminicidio, por el cual solo puede alcanzar una sentencia de 50 años.
El asesinato de Rosabelina es el tercer feminicidio documentado en la entidad, en todos ellos, ya fueron detenidos los presuntos agresores, solo en uno de los casos la fiscalía lo presentó como “desaparición forzosa”, pero podría reclasificarse conforme avance el proceso judicial.
El funcionario explicó que la Fiscalía General del Estado mensualmente inicia, en promedio, 10 carpetas de investigación por violencia digital desde que esta fue tipificada como delito en julio de 2019.
Sin dar un número, reveló que algunos casos ya se han judicializado, mientras que en otros se ha llegado a un acuerdo entre las partes para la reparación del daño.
PRIMERA SENTENCIA
En Querétaro en diciembre pasado se presentó la primera sentencia en el municipio de Jalpan. De acuerdo con el Tribunal Superior de Justicia, durante la audiencia, un juez vinculó a proceso a una persona por violencia digital, aunque se le impuso la medida cautelar de presentación periódica.
La primera persona vinculada por el delito de acoso sexual en la modalidad digital fue una mujer, quien compartió material íntimo de carácter sexual sin consentimiento y en perjuicio de otra persona, a través de las redes sociales.
La penalidad por este delito en Querétaro es de uno a tres años de prisión, 100 a 600 días de multa y 100 hasta 850 días multa por reparación del daño.