El pasado 27 de noviembre cuando diferentes colectivos feministas de Quintana Roo decidieron tomar el Congreso estatal porque a dos días de haber iniciado un plantón afuera de las instalaciones fueron víctimas de acoso y hostigamiento.
Hoy, a 50 días de la toma feminista de este espacio, continúan esperando a que se les dé una respuesta al pliego petitorio entregado tras la represión policial que se vivió el 9 de noviembre en el municipio de Cancún, en una manifestación para exigir justicia por el feminicidio de Alexis.
En entrevista para MILENIO, Mónica Fernández, representante del colectivo Siempre Unidas, resaltó que si bien en un inicio no se tenía planeado realizar la toma del Congreso, consideran que esta es una buena oportunidad para que el Legislativo les responda el pliego petitorio, ya que 10 de los 54 puntos le corresponden a ese Poder.
De acuerdo con Mónica, entre los puntos que le competen directamente a este organismo se encuentran la despenalización del aborto, la promoción de la ley Ingrid, la reforma sobre el acoso callejero, la participación de la red feminista quintanarroense en mesas de trabajo para atender la violencia hacia las mujeres, la iniciativa para contar con un padrón de agresores sexuales y otras más.
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Quienes viven dentro de la toma han tenido unos meses bastante difíciles, ya que no solo han lidiado con la falta de respuesta de las autoridades, sino también con el corte de servicios que han tenido desde mediados del mes de diciembre y pese a que Carlos Joaquín González, gobernador de Quintana Roo se comprometió a restablecer la energía para que puedan tener agua y luz, hasta el momento siguen sin contar con ella por lo cual han podido seguir sobreviviendo con el apoyo de la población.
“Ha sido muy complicado, pero la verdad es que se ha mantenido la toma gracias a la sociedad civil, que han sido quienes han estado apoyándonos. El gobernador emitió un comunicado para reestablecernos los servicios pero aún no ha pasado”, expresó Mónica.
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La representante del colectivo Siempre Unidas, resaltó que para ella, esta lucha es para todas las mujeres, para que puedan vivir una vida libre de violencia, que es algo desde su perspectiva no se les ha garantizado, para que las mujeres puedan decidir sobre su cuerpo, pero también para que las niñas y niños tengan infancias plenas.
“Creo que estamos haciendo historia, la energía entre las mujeres que estamos ahí es muy bonita, obviamente te enoja la omisión de las autoridades, pero también te da mucha fuerza saber que no estás caminando sola en esta lucha, que hay más mujeres igual que tú, interesadas en que se respeten nuestros derechos. Porque soy mujer y no me gusta ser indiferente ante algo que me está afectando y que sepan que esto lo estamos haciendo para todas”, expresó.
De enero de noviembre de 2020 -de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública- ocurrieron 13 feminicidios y además la Secretaría de Salud de la Ciudad de México informó que al menos siete mujeres provenientes de Quintana Roo interrumpieron su embarazo en la capital, entre enero y septiembre.
Hasta el momento la red feminista quintanarroense, conformada por 27 colectivos del estado han asegurado que continuarán con la lucha hasta que se tenga una respuesta por parte de las autoridades y se llegue a un acuerdo respecto al pliego petitorio.
“Seguiremos nuestro camino inclaudicable hasta que la igualdad y la vida libre de violencia se hagan costumbre en Quintana Roo. Ni un paso atrás en la defensa de nuestros derechos”, expresaron por medio de un comunicado el pasado 13 de enero.
DMZ