La secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, María Luisa Albores, advirtió que sólo en 15 de las 32 entidades federativas son separados los residuos sólidos generados por la atención a personas contagiadas por covid-19.
Al comparecer ante comisiones de la Cámara de Diputados con motivo de la glosa del segundo informe de gobierno, la funcionaria subrayó que el problema nacional de la separación de residuos sólidos abarcó también los desechos de personas infectadas y personal médico especializado en la atención de covid-19.
“Solo 15 de 32 entidades federativas han reportado algún tipo de actividad a nivel estatal o municipal para llevar a cabo esto”, dijo.
Subrayó que la separación de insumos utilizados en los hogares y en los hospitales covid depende de la información en los servicios de recolección municipal y estatal.
“Los residuos generados en casas, aun con contagio confirmado, siguen siendo recolectados por limpia municipal, por lo que a veces no se aplica con residuos peligrosos; entonces, es de dar información, de estar teniendo, además de la parte normativa, una cartilla clara y sobre todo que el trabajo se esté realizando”, indicó.
Albores subrayó, sin embargo, que la dependencia a su cargo no tiene la atribución para regular el manejo de esos desechos.
“La Semarnat no tiene esa atribución, por lo que el 10 de julio de 2020, en reunión interna para evaluar la viabilidad de realizar una norma, se concluyó con base a las atribuciones que tiene esta secretaría que se celebraran convenios con las entidades federativas para dar mayor difusión a la cartilla y su correcta implementación para promover un mejor manejo de los residuos en las pandemias”, dijo.
Detalló que la Cartilla de Mejores Prácticas para la Prevención del covid-19 especifica con claridad el manejo de residuos sólidos urbanos.
Al respecto, la diputada Zulma Espinoza, del PVEM, subrayó que uno de los principales problemas ambientales es la incorrecta disposición final de los residuos.
“Con la pandemia, la tasa de residuos peligrosos e infecciosos incrementó exponencialmente; sin embargo, lo más alarmante es que no se contaba con la información suficiente que nos permitiera diferenciar y gestionarlos adecuadamente”, afirmó.
RLO