El 23 de febrero, el director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barragán Villarreal, reveló que a la presa La Boca le quedaban 17 días de vida, pero días después, al señalar “cambios en hábitos de consumo” de la población, el funcionario dio un nuevo plazo, el cual se cumplirá este próximo martes 22 de febrero, paradójicamente, en el Día Mundial del Agua.
Ante esa situación, a partir del 24 de febrero, la plataforma MILENIO-Multimedios se dio a la tarea de documentar con fotografías cada día de la presa La Boca para notar la disminución de agua.
Ayer, el porcentaje de llenado de la presa, ubicada en el municipio de Santiago, era de solo 14.68, y se espera que siga en descenso en los próximos días.
Hace tres meses, la presa de La Boca reportaba un almacenamiento de 17 millones de metros cúbicos, de tal forma que en tres meses éste cayó 64.7 por ciento.
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Abimael Salas Garza, jefe de Meteorología de la plataforma MILENIO-Multimedios, señaló que el panorama por la crisis del agua en el estado era muy preocupante, por estar en una época del año en que llueve muy poco.
Y porque el pronóstico era que las precipitaciones en los próximos cuatro meses estén por debajo de lo habitual, que de por sí es bajo, por lo que, enfatizó, se necesitaría de un milagro para que las presas La Boca y Cerro Prieto no se secaran.
Posterior a ello, en los meses de febrero y marzo se tuvieron en La Boca eventos de oración para pedir por la lluvia, el más reciente de ellos, el 5 de marzo, encabezado por el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López.
Sin embargo, al corte del 16 de marzo, por primera vez en décadas apareció la presa Salinillas, en Anáhuac, con más agua almacenada que La Boca.
Esta problemática generó que se anunciara un plan de reducciones de agua en la metrópoli, el cual iniciará el martes.