Después de que literalmente un remolino de gente, persiguiera la camioneta del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador a su llegada al campo deportivo de este municipio, don Máximo Segura, comisario de uno de los pueblos, le entregó un sobre diciéndole “si quiere tierra para el Tren Maya puede disponer de ella”.
Minutos más tarde, el Presidente afirmó en su acto en Calakmul que en diciembre arrancará la consulta de esa obra férrea en el sur y sureste del país.
“Vamos a llevar consultas ciudadanas el mes próximo, un día de diciembre, ahora sí que sea el pueblo quien decida. No quiero echar a andar algo que no vaya a terminarse que nos pongan piedras en el camino”.
El Presidente afirmó que es su deseo de que la obra concluya antes de que termine su mandato en 2024 "porque yo no me voy a reelegir, soy maderista, 'sufragio efectivo no reelección'". Aunque precisó si es que “el pueblo me ratifica en el puesto en 2022", esto tras la aprobación de la revocación de mandato en el Congreso.
Respecto a la construcción del tres afirmó: "no quiero dar el paso si no voy a tener el respaldo de ustedes. Puesto que mi periodo se termina y solo se hará con el apoyo del pueblo".
Fustigó a sus opositores, "los conservadores" y acusó: "los conozco aunque se disfracen de ambientalistas, pero no se va a imponer nada, como decía el presidente Juárez: nada por la fuerza todo por la razón y el derecho”.
A los reunidos en el campo deportivo, donde se llevó a cabo el evento, recordó que “se canceló la tranza del aeropuerto de Texcoco pero se enojaron mucho, conservadores, corruptos ; decidimos Santa Lucia y comenzaron con 140 amparos. Ya lo resolvimos legalmente y comenzamos ya a construir”.
Dijo que no quiere que pase lo mismo con el Tren Maya.
Una vez que explicó en qué consistirá el proyecto, tal y como lo hizo un día antes en el municipio de Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo, el Presidente realizó otro ejercicio de votación a mano alzada.
“Ayer hice un ejercicio para medir el agua a los camotes, aquí lo voy a hacer también, ustedes son ciudadanos libres, ¿verdad? ¡Ya no hay borregos! Veamos la mente en blanco, una pregunta así nomás: que levanten la mano que levanten la mano los que más consideren que sí debe hacerse el tren maya”. Ante la petición, la gente se manifestó a favor de la construcción.
Así, finalizó su encuentro “vamos a estarnos encontrando, vamos todos juntos y ahora, termino comentándoles que me llevo muy bien con el gobernador; preguntó a los reunidos si consideraban bien o mal “que debemos pelearnos, hay que trabajar en unidad, pues la Patria es primero”.
Antes, había explicado que el gobierno trabaja en reactivar la economía del sur y sureste. “En Campeche se reactiva la producción petrolera, ya estamos trabajando en 20 campos. Ya está aumentando la producción de petróleo, lo mismo con las refinerías. Ahora ya se invierte en la industria petrolera en Dos Bocas y también el Tren Maya”.
“No se va a afectar el medio ambiente, no se va a afectar las zonas arqueológicas”. Repitió que la obra persigue “que haya bienestar en la península de Yucatán; los conservadores corruptos no quisieran que se hiciera nada”.
Antes, el titular del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, Adelfo Regino, se refirió a la consulta sobre el tren que será turístico, de carga y pasajeros, “así vamos a actuar con mucha humildad para impulsar el compromiso del tren”.
Anunció que en días por venir se reunirán autoridades federales, estatales y municipales para ir viendo la ruta de esa consulta.
El proyecto del tren “fortalecerá la biodiversidad que ustedes han cuidado por mucho tiempo. Los pueblos indígenas estamos en este caminar”.
A nombre del ayuntamiento de Calakmul, Sebastián López Vázquez, pidió "consultas efectivas" y que las obras que se decidan en la región “y se respete lo que se decida”.
A su llegada, López Obrador fue objeto de la ceremonia chol ofrenda de velas, donde al final de ella el sacerdote le plantó un beso en la mejilla izquierda.
AE