A partir del próximo lunes comenzarán a trabajar en el sistema de salud de Nayarit los primeros 60 médicos especialistas cubanos de un total de 500 que llegarán al país, anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante la supervisión del Plan de salud IMSS Bienestar, el Presidente aseguró que personalmente tomó la decisión de que vinieran médicos del extranjero a fortalecer al sector salud del mexicano.
"Sabiendo cómo iban a responder nuestros adversarios, los conservadores, tomé la decisión que contratáramos médicos especialistas y van a venir médicos de Cuba ¿saben por qué? Porque la salud no tiene que ver con ideologías, la salud tiene que ver con derechos humanos y si hay que traerlos de Estados Unidos y de Rusia o de Cuba o de Japón o Francia lo vamos a tener aquí", remarcó en el hospital del municipio de Rosamorada, a donde llegarán 12 especialistas cubanos.
El mandatario explicó que el objetivo de su gobierno es que haya equipos y personal médicos en todos los centros de salud, hospitales de primero y segundo nivel así como en unidades médicas rurales.
De acuerdo a las autoridades estatales, los 60 médicos cubanos son especialistas en diferentes ramos como medicina interna, cirugía, pediatría, ginecobstetricia, anestesiología entre otras.
"Es por tiempo indefinido, ahorita vienen con permiso, migración les dio un permiso de 180 días renovable cada tiempo. Cada institución les va a dar alojamiento y en acuerdo con los presidentes municipales", explicó el coordinador de hospitales de Nayarit, Roberto Tovar Gutiérrez.
De acuerdo con el funcionario, los médicos cubanos recibirán su salario en una tarjeta de banco como cualquier trabajador al servicio del estado. Y sobre la certificación para que puedan trabajar en México se limitó a comentar que "eso ya está visto por migración".
Estuvieron presentes ocho médicos originarios de Cuba, quienes evitaron dar alguna declaración.
En tanto, durante el acto oficial, una decena de personas se manifestó contra la federalización del sistema de salud en Nayarit al acusar que habían sido despedidos o no obtuvieron una plaza laboral.
En los discursos del director del IMSS, Zoé Robledo, y del secretario de salud, Jorge Alcocer, estuvieron gritando consignas y quejándose incluso de la contratación de médicos extranjeros.
Sin embargo, fue el jefe del Ejecutivo quien les contestó directamente prometiéndoles que se van a revisar sus casos, pero les advirtió que no será aceptado ninguna persona que haya estado contratada, pero que no trabajaba.
"Los que fueron despedidos injustificadamente, injustamente, van a ser reinstalados, restablecidos, nada más les digo una cosa, se tiene que ver nada más, revisar qué hacen porque no queremos gente que cobre sin trabajar. No deben de preocuparse los que están trabajando, tienen su derecho a salvo y vamos a mejorar el sistema de salud, no van a faltar los medicamentos", destacó López Obrador.
De acuerdo con López Obrador, con la federalización del sistema se ha logrado basificar a 700 trabajadores de un total de 800, entre ellos un grupo de 70 que pertenecen a los manifestantes.
LG