El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la creación del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, que absorberá el programa IMSS Bienestar, y que iniciará operaciones en ocho entidades, hasta integrar las 32, para cumplir su compromiso de brindar atención y medicamentos a 60 millones de mexicanos.
En la conmemoración del Día Mundial de la Salud, el mandatario arremetió de nuevo contra el Seguro Popular, pues dijo que “ni es seguro, ni es popular” dado que en algunos casos los recursos sólo sirvieron para enriquecimientos ilícitos y reiteró que dicho sistema desaparecerá, una vez que se modifique la Ley General de Salud.
López Obrador insistió en que su gobierno heredó un sector salud “aún más destruido y corrompido que el educativo”, por lo que, dijo, se dará a la tarea de “romper inercias políticas y reformas estructurales” para recuperar el federalismo de la Secretaría de Salud.
Puso de ejemplo que México gastaba 4 mil millones de dólares anuales en la compra de medicinas e insumos, pero se carecía de los mismos en hospitales, clínicas, centros de salud e institutos de alta especialidad.
En la presentación del Informe de la Comisión de Alto Nivel “Salud Universal en el Siglo XXI: 40 años de Alma-Ata” el Presidente consideró inaceptable que tres distribuidores farmacéuticos —Fármacos Especializados, de Francisco Pérez Fayad; Dimesa, a cargo de Alejandro Álvarez; y Maypo, que dirige Jack Rodríguez —, se vieran beneficiados en la administración anterior y concentraran el 65 por ciento de los contratos.
Bachelet pide hacer realidad el derecho universal a la salud
Al acompañar a Andrés Manuel en Palacio Nacional, la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, consideró que esencial pasar del papel a la acción, a convertir en realidad el derecho universal a la salud como pilar del desarrollo y crecimiento de todo país.
Mientras que la directora Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud, Carissa F. Etienne, consideró que así como las masacres, los asesinatos y la violencia, la falta de acceso a los servicios universales de la salud resulta inaceptable, sobre todo por tratarse de un humano esencial para el progreso y las democracias.
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La también líder de la Organización Panamericana de la Salud refirió que el Informe de la Comisión de Alto Nivel aporta recomendaciones para ampliar el acceso y la cobertura de salud universal en la región para 2030, sin dejar a nadie atrás, y eliminando las barreras de acceso, de inequidad.
“Que todas las personas, donde sea que vivan, tengan cobertura de salud y puedan acceder a la atención sin barreras y sin padecer graves dificultades financieras, es nuestro objetivo principal”, afirmó.
Por su parte, Néstor Méndez, secretario general adjunto de la Organización de los Estados Americanos, explicó que conforme al diagnóstico, existen alrededor de 186 millones de personas de la región de las Américas sin acceso a la salud, que significa que cuatro de cada diez hogares se encuentran en economías vulnerables.
evl