La coordinadora del PAN en la Cámara de Diputados, Noemí Luna, afirmó que el presidente Andrés Manuel López Obrador heredará a su sucesora, Claudia Sheinbaum, un país en ruinas, polarizado y dividido, con altos índices de inseguridad, una economía disminuida y el endeudamiento más grande de la historia.
- Te recomendamos ¡Ya inició! Despiden a AMLO con festival 'Hasta Siempre Presidente' en Revolución Política
“Nada que celebrar en seis años perdidos para México”, puntualizó la también secretaria general del blanquiazul.
Luna sostuvo, además, que López Obrador culmina el sexenio de la “transformación de cuarta” con un promedio de 100 mentiras en cada una de sus mil 450 conferencias matutinas.
Con base en análisis de organizaciones especializadas, la legisladora advirtió que, en materia de seguridad, la administración saliente cierra como la más sangrienta de la historia moderna, con 200 mil homicidios sin estar el país en situación de guerra.
Lamentó asimismo las condiciones de pobreza en que se deja a los mexicanos, con leyes aprobadas “al vapor” por el oficialismo, pero sin presupuestos para aplicarlas en lo inmediato.
“Tenemos 5 millones más de personas en situación de pobreza laboral con respecto a las que había al inicio de este gobierno. Esto, a pesar de que se ha hablado de un aumento superior al 100 por ciento en los salarios mínimos; empero, si la inflación no se contiene, los 249 pesos que se pagan en este 2024 serán insuficientes para superar el umbral de pobreza salarial”, dijo.
La lideresa parlamentaria de Acción Nacional reprobó la desaparición de esquemas exitosos que contribuían al desarrollo del país como las Escuelas de Tiempo Completo, el Seguro Popular y la Guardia Nacional con mando civil en el combate a la inseguridad.
“No tuvimos el sistema de salud de Dinamarca ni se descentralizó el gobierno federal a los estados, como ofreció López Obrador en sus 100 compromisos”, remarcó.
La diputada Luna denunció asimismo que el actual gobierno concluye con manipulación de cifras de desaparición forzada, pues organizaciones de la sociedad civil criticaron el censo de búsqueda implementado desde la Secretaría de Gobernación, con el cual se pretendió reducir la cifra de personas desaparecidas, al incurrir en la torpeza de hacer sondeos casa por casa.
Los mismos estudios subrayan la crisis forense por más de 50 mil personas fallecidas no identificadas; 34.8 millones de connacionales en pobreza laboral; múltiples manifestaciones, por casos como Ayotzinapa y recientemente los trabajadores del Poder Judicial, falta de medicamentos para niños con cáncer, contra la violencia hacia las mujeres y de exigencias de madres buscadoras.
“La economía está a punto de entrar a recesión, las desapariciones se mantienen, la impunidad está peor que nunca e iniciativas como el Centro Nacional de Identificación Humana fueron abandonadas”, concluyó la legisladora zacatecana.
LP