El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no trató con el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, el informe sobre derechos humanos que publicó el Departamento de Estado.
En la conferencia mañanera, el mandatario dijo que no se tocó el tema porque el informe es superficial y no tiene sustento.
"La verdad es muy superficial, no tiene sustento. Cómo le vamos a hacer caso, si dice que nosotros promovimos que se difundieran 20 mil señalamientos en contra de la presidenta de la Suprema Corte, dónde está la prueba, es muy irresponsable", expresó.
López Obrador calificó este informe como "una tomadura de pelo" que contrario a México a ellos les afecta porque muestra que no son serios y son mentirosos.
Este lunes, el gobierno de Estados Unidos presentó el informe anual de derechos humanos del Departamento de Estado en el que muestra preocupación por los ataques verbales del presidente contra el Poder Judicial, en particular contra la presidenta de la Corte, Norma Piña y también los señalamientos a la prensa.
En este sentido, exigió pruebas de los señalamientos que está haciendo el Departamento de Estado en contra de su gobierno.
Además, cuestionó la autoridad de Estados Unidos para meterse y criticar un pleito que está ocurriendo entre dos poderes en México.
"A ver que prueben, cómo nos vamos a estar metiendo en eso, es como si estuviese yo contestando todos los días el quién es quién en las mentiras. Lo hago para informar, concientizar a los jóvenes de cuál es el tejemaneje de la política en México", agregó.
SNGZ