La Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) afirmó que "los ataques armados directamente contra niñas, niños y adolescentes son la expresión más cruda del fracaso de la estrategia de seguridad basada en la militarización de todo el país" luego de la agresión a la familia LeBarón en los límites de Sonora y Chihuahua en donde murieron seis menores.
La red recordó que el presidente Andrés Manuel López Obrador también tiene la encomienda de presidir el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna); sin embargo, "no se ha presentado a las dos sesiones plenarias para cumplir con su responsabilidad legal".
El organismo hizo un llamado a "garantizar justicia y acceso a la verdad de los hechos" en todos los casos de asesinato de niños, pues mencionó los asesinatos desde el sexenio de Felipe Calderón y pese a ello "López Obrador sigue sin escuchar las recomendaciones" que el comité de derechos del niño de la ONU ha hecho al país desde 2015.
Una de ellas es "tomar medidas urgentes para prevenir las muertes violentas, los asesinatos y las desapariciones de niñas y niños y sus padres y madres, incluyendo un análisis de las causas de estos actos violentos como la violencia armada, el crimen organizado, el tráfico de drogas, la desigualdad de género, la pobreza y la marginación".
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Indicó que los recientes asesinatos de menores "son un urgente llamado de atención al Estado para que se realicen medidas de prevención y atención en escenarios de crimen organizado donde la violencia extrema es cotidiana".
icc