La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, suscribió una serie de compromisos en favor de los pueblos y barrios originarios, así como de las comunidades indígenas, de la capital del país, esto con el objetivo de reconocer la deuda histórica que se tiene con ellas y su derecho a reivindicar su identidad tradicional.
Durante el evento del Día Pluricultural de México, realizado en el Antiguo Palacio del ayuntamiento, la mandataria capitalina hizo énfasis en qué se tiene que avanzar para garantizar que las tradiciones y saberes indígenas sean reconocidas como parte del patrimonio cultural de la ciudad.
"Para nosotros, la construcción del segundo piso de la cuarta transformación demanda la ampliación de derechos, y no la restricción de los mismos, a favor de los indígenas y de los asentados históricamente acá; en especial, los derechos de las mujeres indígenas, quienes sufren en mayor medida la violencia y la discriminación", detalló.
En ese sentido, detalló una serie de puntos entre ellos que la Ciudad de México reconoce al 12 de octubre de cada año como la conmemoración del Día de la Resistencia Indígena; que se ratifica a la capital como una ciudad pluricultural, plurilingüe y pluriétnica donde habitan, además de sus pueblos y barrios originarios, al menos 55 de los 70 pueblos indígenas de la nación, lo que la lleva a ser la ciudad con mayor presencia y diversidad cultural del país y América Latina.
Asimismo se reafirman los derechos en los que ahora se alinean en el reconocimiento de los pueblos indígenas como sujetos de derechos públicos; también impulsarán acciones que visibilicen, promuevan, respeten, protejan y garanticen en todo momento los derechos de las niñas y mujeres indígenas, en aras de alcanzar la igualdad sustantiva y una vida libre de violencia y discriminación.
Junto con esto también se implementarán políticas públicas de atención transversal y la construcción de planes de justicia en conjunto con los pueblos y barrios originarios y comunidades indígenas residentes, en un marco de respeto a sus derechos fundamentales y se concluirá, el Sistema de Registro y Documentación que garantice una amplia inclusión y reconocimiento a los pueblos y barrios originarios, así como de las comunidades indígenas residentes.
Por último se garantizará la participación y consulta en los procesos hacia los pueblos y barrios originarios y comunidades indígenas residentes, conforme a los estándares internacionales y la legislación nacional y local; y el gobierno se compromete a ser un territorio libre de racismo y discriminación y, para ello, se adoptarán todas las medidas legales y administrativas para lograr una ciudad incluyente y diversa.
"La resistencia de los pueblos originarios es parte fundamental de nuestra historia y es crucial entender su importancia, porque al hacerlo honramos también las invaluables contribuciones que estas comunidades han hecho a la conformación de nuestra historia y de nuestra identidad", precisó Brugada.
ROA