En las últimas semanas se han planteado por parte de diversos grupos de ambientalistas algunas alternativas para mitigar el intenso calor que se ha registrado en la zona sur de Tamaulipas, coincidiendo en la necesidad de sembrar árboles endémicos para que logren su crecimiento adecuado y puedan cumplir con su función.
Dentro de esas propuestas existe un proyecto que contempla el sembrado de árboles en los estacionamientos de plazas comerciales.
Del mismo modo proponen plantar algunos frutales que además de ayudar en la oxigenación y reducir la temperatura, brinden un doble beneficio al otorgar frutos a la población.
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En este mismo sentido desde el ámbito legal consideran necesario hacer cambios en las leyes para que desde áreas como desarrollo urbano, obras públicas y ecología se supervise que no se haga una tala desmedida Altamira representa un amplio territorio, pero con mucha falta de cultura en el sembrado de árboles, afirma el representante de Ambientan en Altamira José Luis Sánchez Morales.
“Es un problema de los municipios, pues no tienen conocimiento en el ramo, por lo que los invito a investigar ya que la ley prohíbe cortar los árboles desarrollados. Para cortar un árbol se tiene que hacer un trámite legal, aunque sean municipios, porque de hecho es éste quien tiene la obligación de hacer cumplir la ley a un particular”, apunta.
El ambientalista añade que ley establece que se puede sembrar un árbol a 1.5 metros de los límites territoriales de un terreno con otro, pero afuera en lo que son las áreas públicas como banquetas, guarniciones o todas las zonas que pueden ser arboladas se debe sembrar un árbol mínimo cada 30 o 40 metros.
“Si visitas la zona habitacional casi todas carecen de árboles, porque los constructores no cumplen la ley que los obliga a que deben dejar el 20 por ciento arbolado de toda la zona donde vayan a construir”, explica José Luis Sánchez.
Agrega que los constructores hacen acuerdos o convenios con los municipios para en vez de sembrar árboles poner un toldo, lo que no es lo mismo pues un árbol es vida, salud y purifica el aire.
“Está comprobado que un árbol purifica el aire de 20 humanos, pero también podemos sembrar frutales, que sean benéficos para la misma comunidad y ayudar en otros problemas que tenemos como la contaminación”, agrega.
Sánchez Morales añade que regiones como la zona sur de Veracruz, Tabasco y Chiapas son muy arboladas y las temperaturas son reguladas por el mismo medio ambiente.
Asegura que si se cumpliera con la norma de tener un árbol a una distancia de entre 30 y 40 metros y dependiendo de la cantidad, podríamos bajar la temperatura entre 10 y 15 grados, además de purificar el aire.
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Reformar lineamientos
Desde el ámbito legal existe la propuesta de sembrar árboles en las banquetas que así lo permitan dentro del municipio.
Para lograr esto Eustacio Reyes Hernández propone modificar diversos artículos en la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano para el estado de Tamaulipas, además del Reglamento de Construcciones en la entidad, para efecto que en las nuevas construcciones las banquetas sean más amplias y se pueda plantar un árbol, para de esta forma ayudar a disminuir el calentamiento global.
“Es momento de actuar y no nada más de crear esa ley, que las direcciones de obras públicas, desarrollo urbano en Tampico, Ciudad Madero y Altamira vigilen y que realmente se realicen esas acciones que estoy promoviendo”, señala el abogado.
Indica que los inspectores no están haciendo su trabajo y apunta que la ecología y el medio ambiente no puede cambiarse en base al dinero; señalando que muchos de los permisos o licencias se autorizan bajo circunstancias no muy claras, por lo que insiste en que se debe aplicar la ley.
VLSS