Autos antiguos, carne asada e innovación, pasiones de Héctor Alberto Sánchez Morales, presidente de la CMIC

Edición Fin de Semana

El director de la industria de la construcción en Puebla pasó de coleccionar coches en miniatura a verdaderos autos de época; le resulta difícil decidir entre el chile en nogada y la carne, pues resalta su origen regio.

Desde su infancia el empresario coleccionaba autos a escala, pero ahora son autos reales. (Melanie Torres)
Rafael González
Puebla /

En su infancia, Héctor Alberto Sánchez, actual presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Puebla, llegó a atesorar casi 800 coches a escala, hobbie que con el paso del tiempo lo llevó a coleccionar autos reales, pero con la característica de que fueran antiguos.

Sin embargo, esta no es la única pasión del originario de Monterrey, ya que es un amante de la gastronomía, en especial de aquella que prepara en su hogar. En entrevista para MILENIO Puebla, el ingeniero, quien suma casi 30 años de vivir en la Angelópolis, afirma que le gusta estar al día en las innovaciones tecnológicas, gusto que lo llevó a colaborar en un noticiario radiofónico donde cada semana presenta las novedades que la ciencia desarrolla.

Héctor Alberto Sánchez Morales afirma que le gusta estar al día en las innovaciones tecnológicas. (Melanie Torres)

¿Practica algún deporte?

“Siempre me ha gustado el ejercicio, estuve en el equipo de caminata (en la escuela) y ya últimamente empecé a trotar, a correr, corrí dos maratones, el de Chicago y de Filadelfia, y a la fecha sigo manteniéndome en forma ya sin correr grandes distancias”.

Le llama la atención todo lo referente a las innovaciones tecnológicas ¿cierto?

“Efectivamente. Eso me mantiene siempre a la vanguardia, siempre (vigilante) a todas esas cosas nuevas, me mantiene atento a lo que está pasando en el mundo, me mantiene alerta el estar buscando siempre lo que viene nuevo, eso me apasiona muchísimo, el tema de las innovaciones”.

¿Qué otra cosa le apasiona?

“Hay un deporte que no he jugado pero que me gusta verlo: es el futbol americano. Me apasiona cuando es temporada de futbol americano y mi equipo favorito son los Acereros Pittsburgh y también ahí, en segundo plano, los Vikingos de Minnesota”.

¿Su relación con los Acereros viene por la construcción?

“Sí (…) porque mi papá estuvo en Hylsa y hacían varillas, acero, etcétera, y de alguna forma lo trasmitía en su día a día; y los Vikingos de Minnesota, siempre para adelante, de tener cierta picardía y rebeldía”.

Respecto a las innovaciones tecnológicas, ¿qué es lo que más le ha sorprendido?

“No hay un tema en lo particular que me diga ‘este me llamó más la atención’, porque todos me llaman la atención (…) Las televisiones, los relojes, los automóviles, la comodidad en el hogar, todas esas cuestiones que hechas en el futuro, pero en el presente realmente es súper interesante”.

En el ramo de la construcción, ¿qué innovaciones vislumbra para el futuro?

“De hecho hay impresoras de concreto para hacer una casa completita con muros, con puertas, etcétera, y hay una inyectora de concreto donde en menos de un día puedes tener una casa de más o menos de 150 metros cuadrados. Así como eso, toda la energía solar, la parte del agua potable, la interconectividad, el Internet, las comunicaciones”.

Como buen regio, ¿le gusta preparar la carne asada?

“Me encanta cocinar y teniendo sangre regia nos apasiona también la parte de la carne asada”.

¿Qué prefiere? ¿una carne asada o un chile en nogada?

“Me la pusiste difícil porque me encanta la cocina poblana. El chile en nogada me parece un platillo gourmet. No tienen comparación, me pones en un dilema porque en realidad me gusta comer bien, me gusta comer rico, me gusta disfrutar cada uno de los platillos que se preparan aquí en Puebla, el pipián, el mole poblano, el fideo seco, el mixiote, las chalupas, los molotes, las tostadas, todo eso, pero desde luego en la contraparte también tengo la sangre regia por lo que me gusta unas buenas costillitas de res, un rib eye, unos tuétanos, un machacado con huevo”.

"Me gusta cada uno de los platillos que se preparan aquí en Puebla (…) pero desde luego en la contraparte también tengo la sangre regia": Héctor Alberto Sánchez Morales. (Melanie Torres)

¿Cómo surge ese gusto por cocinar?

“Por mi mamá, que es una buena chef. Desde pequeños nos enseñó a hacer las cosas por nosotros mismos. No se me dificulta desde chico hacer cualquier cosa, desde un simple huevo estrellado hasta algo más sofisticado”.

¿Tiene alguna colección?

“De chicos tuvimos nuestra colección de coches a escala. Llegué a tener cerca de unos 800 y luego ese gusto por ese tipo de automóviles me llevó a los autos antiguos. Tengo un Mustang 66, un Citroën 70 y un vocho 65; y acabó de vender una camioneta Apache 57”.

¿Qué le pasó a esos coches miniatura?

“Los usaron mis hijas y algunos se los regalé a mis sobrinos. Todavía conservo unos 100 más o menos. Me traen recuerdos muy significativos, tal vez me quedé los preferidos”.

¿Cuál es la guía para ser un coleccionista de autos antiguos?

“Se requiere paciencia, tener la conciencia de que el automóvil tiene más de 50 años a lo mejor y no tiene la modernidad ni los aditamentos de comodidad (…) entre más te enfoques al cuidado vas a tener disfrute, porque si no se te va estar parando a cada rato en cualquier parte”.

¿Pertenece a algún club de autos antiguos?

“No. Me lo han propuesto muchas veces y no he aceptado porque lo hago solo para mi disfrute”.

¿Permite que otras personas los manejen?

“Desde luego que sí, pero con el debido cuidado (…) los he prestado para exhibiciones o me los piden de alguna agencia. Poco lo hago porque requieren que estén ahí y todo el mundo se quiere subir y la verdad es que no prefiero participar tanto”.

mpl

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